br
La quimioterapia con docetaxel reduce un 32% el riesgo de recaída
Es más eficaz que el régimen con 5-Fu que se utilizaba en esta fase inicial
C. Ossorio
Barcelona
Hasta el momento se sabía que añadir taxanos es útil en la terapia adyuvante para el cáncer de mama con afectación ganglionar. Sin embargo, ningún estudio había incorporado este tratamiento para abordar los casos de ganglios negativos. Lo ha hecho por primera vez en el mundo un equipo de investigadores españoles, del Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (Geicam) —con el apoyo de Sanofi-Aventis—, que ha logrado modificar la terapia estándar de este subgrupo específico con la aprobación de la Agencia Europea del Medicamento (EMA).
En concreto, con el estudio 9805/Target 0, publicado en The New England Journal of Medicine, han demostrado que la combinación de docetaxel (Taxotere), adriamicina y ciclofosfamioda (TAC) es superior al régimen de fluorouracilo (5-Fu), adriamicina y ciclofosfamioda (FAC) en la reducción de recaídas, el objetivo primario del estudio.
En él participaron 1.060 mujeres con cáncer de mama sin afectación axilar y al menos un factor de alto riesgo de recurrencia. Se randomizaron en dos grupos, de forma que 539 recibieron TAC y 521 FAC cada tres semanas durante seis ciclos tras la cirugía.
Como señaló Ana Lluch, jefe clínico de Oncología del Hospital Clínico de Valencia y una de las autoras del trabajo, el grupo de mujeres que recibió la combinación con el taxano (docetaxel) disminuyó el riesgo de recurrencia en un 32 por ciento.
Un 88 por ciento permaneció libre de enfermedad a los seis años.
“Por primera vez un estudio español, realizado por un grupo de investigación independiente y con pacientes españolas, ha establecido un nuevo estándar en el tratamiento de este tumor en su estadio más inicial”, declaró Miguel Martín, presidente de la Fundación Geicam y jefe del Servicio de Oncología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid.
Según apuntó, en la actualidad se logra diagnosticar de forma precoz a cerca del 70 por ciento de las pacientes, debido a las campañas de cribado con mamografías.
A partir de ahora, este nuevo tratamiento conseguirá curar “a más de un 6 por ciento adicional de pacientes”, que en términos absolutos se traduce en más de 800 mujeres al año.
“Hasta hace poco tiempo a estas mujeres se las consideraba erróneamente de ‘bajo riesgo’, por lo que no se investigaban nuevos tratamientos con este grupo de pacientes. Este concepto es equivocado y ha llevado a hacer un tratamiento subóptimo de estos casos. Ahora gracias a este estudio contamos con un arma terapéutica más”, celebró Martín.
Además, los expertos insistieron en que la ventaja con docetaxel se mantiene con independencia del estado del receptor hormonal, de la menopausia y del número de factores de riesgo.
Lluch comentó que habrá que esperar más tiempo —ahora llevan 10 años de seguimiento global— para hablar en términos de supervivencia global, si bien en la rama de taxano hay una tendencia a menor mortalidad.
