| viernes, 10 de julio de 2015 h |

El pasado 24 de junio tomamos posesión como nuevo equipo para dirigir el Consejo General de Farmacéuticos durante los próximos años. Un equipo sólido, formado y con experiencia, desde el que queremos llevar a la práctica una nueva Farmacia, más asistencial, que responde a las necesidades de la sanidad y de los pacientes.

Una Farmacia comprometida, responsable socialmente y que está demandando ser más útil a la Sanidad, para mejorar los resultados en salud de los pacientes y contribuir al reto de la continuidad asistencial, sin brechas entre los niveles de atención. Para ello es fundamental que las administraciones sanitarias hagan una firme apuesta por incluir a la red de farmacias en las estrategias sanitarias y en la atención sociosanitaria, potenciando la práctica colaborativa entre los profesionales sanitarios (médicos, farmacéuticos, enfermeras, etc.). Ha llegado la hora de contar con el farmacéutico comunitario como profesional sanitario, y así lo hemos manifestado ya.

Queremos desarrollar los diez compromisos de la Declaración Córdoba, presentada en el XIX Congreso Nacional Farmacéutico, porque todos ellos responden a mejorar la Sanidad y la atención al paciente. Y como primera prioridad, queremos que el paciente pueda seguir recibiendo la atención farmacéutica desde sus farmacias, evitando molestias innecesarias para poder acceder a los medicamentos que han sido retirados de las farmacias sin criterio sanitario, generando costes añadidos al sistema (traslados, horas de trabajo perdidas, etc.)

La responsabilidad social es parte de nuestro ADN como profesionales sanitarios. Tenemos muchos objetivos, proyectos y retos en los que vamos a ir avanzando, pensando como farmacéuticos y respondiendo a nuestra misión de atender las necesidades de los pacientes en relación a los medicamentos que utilizan. Comenzamos una nueva etapa para el Consejo General en la que vamos a seguir apostando por la responsabilidad social, el diálogo abierto con todos los grupos de interés, el buen gobierno y, por supuesto, la transparencia.