PRESCRIPCIÓN/ Dentro del segundo programa de mejora en el uso de medicamentos

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C.B. R./E.M.C. Madrid | viernes, 22 de junio de 2012 h |

La Consejería de Sanidad de Murcia revisará en los próximos cuatro años las prescripciones de 100.000 enfermos polimedicados en el marco del segundo programa de acción para la mejora en el uso de los medicamentos. El anterior plan, en el que se impulsaron medidas encaminadas a la mejora de la eficiencia en la prescripción, permitió un ahorro próximo a los 155 millones de euros.

Para ello, según cuenta Asensio López, jefe de Servicios y Proyectos Estratégicos de la Consejería de Sanidad de Murcia, se ha desarrollado un módulo que identifica a los pacientes polimedicados y salta cuando acuden a la consulta. El dispositivo permite revisar el conjunto de las prescripciones y decidir si la medicación es necesaria o se debe reordenar, ya que en algunos casos el paciente recibe hasta 25 fármacos distintos. Se trata de tomar una decisión sobre su medicación, no de “quitar fármacos a ciegas”, insiste López.

La medida se enmarca dentro del análisis del aumento en el número de recetas en la comunidad autónoma, que ya contemplaba el primer programa. En esa primera fase, se revisaron las prescripciones de 10.000 pacientes polimedicados, pero también se puso el acento en la patología aguda, trabajando intensamente en definir las indicaciones adecuadas en las más frecuentes, asegura el responsable.

Por otra parte, estas herramientas enlazan con el programa de atención a enfermos crónicos que la consejería presentará en las próximas semanas. El tratamiento de estas patologías supone el 80 por ciento de las recetas, de ahí que Sanidad apueste por abordarlo desde una triple perspectiva, según López: seguridad, adecuación a guías clínicas e integración de las terapias. Dentro de este apartado, el jefe de proyectos insiste en que aunque no hay objetivos marcados de ahorro, existe un amplio margen de mejora en este capítulo.

Otro punto clave del nuevo programa de uso racional del medicamento es la conciliación terapéutica en atención primaria y hospitalizada. Asensio López considera que es uno de los elementos que más se deben desarrollar, ya que la interacción entre ambos niveles asistenciales resulta muy débil todavía. En su opinión, la atención especializada tiene mucho que aprender de las mejoras alcanzadas en la prescripción en el primer nivel, que ha experimentado un avance “enorme” en los últimos tiempos. “El reto ahora es trasladar esa cultura al profesional hospitalario, que ha estado al margen de la importancia de la gestión del medicamento desde el punto de vista del coste”, insiste.

En la búsqueda de una prescripción de calidad, Asensio López admite que se han inspirado en las herramientas puestas en marcha en buena parte de las comunidades autónomas. Una de las más criticadas por los facultativos, la sustitución en la prescripción electrónica de cinco fármacos de marca por sus genéricos, no se ampliará a otros medicamentos: las condiciones han cambiado y se han equiparado los precios.

Sí profundizarán en el análisis de la variabilidad clínica, elemento que mide resultados, explica López, en la gestión de los recursos. De hecho, la evaluación es uno de los pilares de la Estrategia 2015 en la que se integra el programa.