Nuevo curso/ La profesión médica reclama que un hipotético sucesor en el ministerio dé continuidad al trabajo y al talante de la actual titular

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La garantía de que no habrá nuevos recortes, el fin del debate sobre el copago o la colegiación obligatoria, compromisos para el nuevo curso

La ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, asegura que no tiene intención “por el momento” de abandonar su cargo en el Gobierno

| 2010-09-06T10:09:00+02:00 h |

E.M.C.

Madrid

Septiembre comienza para la sanidad española y sus profesionales con una buena lista de asignaturas pendientes, la resaca de meses de recortes económicos y la incertidumbre sobre quién llevará las riendas del ministerio en un futuro no muy lejano, si finalmente Trinidad Jiménez logra ganar las primarias del Partido Socialista de Madrid para convertirse en candidata a la presidencia de la comunidad en los comicios regionales.

A pesar de que la actual ministra de Sanidad ha reiterado su intención de continuar en el cargo, con independencia del resultado de las elecciones internas que se llevarán a cabo en octubre, aludiendo a que otros ministros en su misma situación ya lo hicieron en su momento, el sector sanitario ha recibido la noticia con un cierto recelo.

La petición unánime es que cualquier posible cambio en la cartera de Sanidad no ponga en peligro la continuidad en temas prioritarios como el impulso a la política de recursos humanos, el avance hacia el pacto por la Sanidad, que, si se cumplen las previsiones de principios del verano podría despedir este mes con un acuerdo entre el Partido Socialista y el Partido Popular, o de aspectos concretos como el desarrollo de la formación troncal que tanto revuelo ha traído consigo en los últimos meses.

En este sentido, CC.OO. ha expresado ya su inquietud por la “rotación abusiva a la que se ha sometido al ministerio en los últimos tiempos”, en opinión de Antonio Cabrera, secretario general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios del sindicato. Mientras que la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM), a través de su secretario general, Patricio Martínez, ha destacado la capacidad de diálogo y la defensa de la profesión médica asumida por la actual ministra, por lo que ha manifestado su deseo de que un hipotético sustituto comparta el perfil político de Jiménez.

Desde otras esferas, como el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM), la prioridad de su presidente, Iñigo Noriega, es que cualquier cambio garantice la continuidad en la línea de trabajo y colaboración ya establecida.

Retos propios o heredados

Un aspecto crucial para la profesión médica en pleno es que el hipotético sucesor asuma los compromisos alcanzados por Trinidad Jiménez con el colectivo. Entre los más importantes, para el portavoz del foro que la representa, Patricio Martínez, está la negativa a nuevos recortes en el sector sanitario, tal y como afirmó la ministra en la última reunión con sus representantes a finales de julio. No es poco en un momento en el que, de entrada, la rebaja salarial se consolida, tras el rechazo del Defensor del Pueblo a interponer un recurso de inconstitucionalidad contra la medida a petición de los sindicatos, y con la sombra de la huelga general el 29 de septiembre.

Los portavoces de los médicos también esperan que, ante un posible cambio, el debate sobre el copago se aparque definitivamente, a instancias de lo expresado por la ministra en el mismo encuentro, en el que se mostró rotunda: “No hablaremos sobre ello en esta legislatura”, aseguró. Aunque, por su parte, la ministra de Economía, Elena Salgado, ha inaugurado septiembre con la seguridad de que el Gobierno adoptará nuevas medidas para combatir el déficit público si constata que no puede cumplir con sus objetivos.

Entre las asignaturas pendientes de abordar en los próximos meses, con o sin Jiménez, el foro también destaca la adopción de un plan de recursos humanos a escala nacional o el impulso al registro de profesionales, un punto en el que coincide con CEEM, que tampoco pierde de vista la definición del modelo de troncalidad en una etapa decisiva en su desarrollo.

Prioridades compartidas con el compromiso de dar más peso a los profesionales en el Pacto por la Sanidad, el respaldo a la colegiación obligatoria y el desarrollo de la LOPS para definir las competencias de los distintos profesionales sanitarios.

Para el Consejo General de Enfermería, este curso arrastra la aprobación del real decreto que marcará las reglas de juego de la prescripción enfermera, así como el desarrollo de las especialidades.

El otoño llega también al compás de las elecciones sindicales, que reabren la petición de una mesa de negociación propia, y del debate en la Unión Europea sobre la controvertida directiva de las 65 horas semanales.