Los sindicatos de Osakidetza han reclamado al Departamento vasco de Sanidad que convoque la Mesa Sectorial y que realice una propuesta en los términos solicitados por la “amplia representación de la plantilla” para recuperar la calidad del servicio y los derechos laborales que les han “robado”. De no dar una respuesta satisfactoria, llamarán a los trabajadores a secundar diversas manifestaciones y paros para los próximos meses.
La primera de las movilizaciones previstas sería el 26 de junio con una manifestación en Bilbao, a la que seguiría la semana del 7 julio el envío masivo de emails a Centrales.
Para la semana del 15 de septiembre se llevarían a cabo encierros en grandes hospitales y se empapelarían las direcciones de Salud con un documento reivindicativo y el 11 de octubre se secundarían manifestaciones.
A partir de la semana del 30 de octubre, los sindicatos convocarán paros y huelgas hasta llegar a 34 horas de paro acumulado. Los paros se realizarán de forma progresiva hasta lograr los objetivos de los sindicatos.
En una rueda de prensa en Bilbao, los sindicatos del Servicio vasco de Salud han denunciado que la eliminación de los canosos ha llevado el aumento de la jornada laboral de algunas personas a 100 horas anuales más.
“Hasta ahora el problema era que la imposición de la legislación básica no dejaba ningún margen, ni siquiera para paliar parcialmente esos recortes. La sentencia que ha tenido la Ertzaintza demuestra que incluso desde la interpretación más legalista existe margen. La falta de voluntad del Gobierno vasco en este aspecto resulta vergonzosa”, ha indicado.
A su juicio, la plantilla de Osakidetza ha realizado “suficiente esfuerzo hasta el momento”. “Estos nuevos recortes suponen una humillación para los trabajadores y no vamos a permitir que se ejecuten. Debemos responder de forma contundente si no queremos abrir la puerta a nuevos recortes que Osakidetza está valorando en estos momentos”, han advertido.
Por ello, los sindicatos se han comprometido a convocar movilizaciones “continuas y crecientes” hasta lograr, en primera instancia, una propuesta de creación y estabilización del empleo por parte de Osakidetza, que contemple la sustitución de bajas y la reducción de la jornada laboral, y una fecha de resolución inmediata de la convocatoria de Desarrollo Profesional de 2011. “No renunciamos a ningún derecho, pero estas son las prioridades de las movilizaciones que planteamos”, han señalado.
Tras indicar que Osakidetza ha eliminado más de 3.000 puestos de trabajo, han explicado que ello ha supuesto un aumento de cargas de trabajo y un “empeoramiento sustancial de la calidad asistencial, que únicamente mantiene niveles satisfactorios gracias a la dedicación de los trabajadores y trabajadoras”.
Asimismo, las centrales han explicado que ven cómo aumentaba la jornada laboral un mínimo de 45 horas y han eliminado la “histórica conquista” de las 35 horas semanales. En lo referente al salario, han destacado que han perdido un mínimo del 17% de poder adquisitivo.
“Osakidetza precariza el empleo eventual que mantiene, reduciendo las jornadas que contrata y eliminando la opción de contratos de larga duración. Han dejado de sustituir a la plantilla cuando enferma o descansa salvo en casos contados. El Gobierno vasco gasta 1.000 millones de euros menos que la media de la OCDE en sanidad, etc.”, han manifestado.
En este contexto de “recortes y falta de negociación”, en la Mesa Sectorial de 29 de abril Osakidetza informó a los sindicatos que va a suspender la convocatoria de desarrollo profesional de 2011 y no va a devolver ningún canoso, “aunque la interpretación de un juez lo permita”, han criticado.
Aunque han reconocido tener diferentes lecturas respecto al Desarrollo Profesional, han advertido de que no pueden permitir que se discrimine a unos trabajadores respecto a otros o se “robe” ningún nuevo derecho laboral.
