E.M.C. Madrid | viernes, 12 de diciembre de 2014 h |

“Nuestra misión es seguir consolidando el sistema sanitario, con una cabeza privilegiada como es el ministro Alfonso Alonso, que no solamente va a mantener la maquinaria del ministerio funcionando sino que, además, va a abrirse a todos los sectores, a entrar en contacto desde ya con ellos, como han hecho, por otra parte, todos los ministros anteriores”. Es la declaración de intenciones del nuevo secretario general de Sanidad y Consumo, Rubén Moreno, que tomó posesión de su cargo el pasado miércoles en el salón de actos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad bajo la atenta mirada del nuevo ministro y de la secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Susana Camarero, y arropado por una nutrida representación del sector sanitario.

Moreno reconoció la “extraordinaria labor” desarrollada por el anterior equipo durante estos últimos tres años y recordó que nos encontramos “en el tramo último de la legislatura”. Asimismo, admitió que mantener todo en funcionamiento “exige un trabajo enorme” pero comprende que la gente “necesite también hablar con quien es la cabeza máxima en este terreno en España”.

El secretario general aseguró que han empezado ya a trabajar en el pacto. “El area sanitaria está transferida en su mayor parte pero tiene una labor fundamental y en la parte de farmacia estamos hablando con todos los agentes implicados para poder avanzar en cuestiones que van a ser muy importantes para la sostenibilidad del sistema”, avanzó, puntualizando que “hay que hablar con estos sectores, conseguir integrarlos e implicar a sus responsables para hacerles más partícipes”.

Durante su intervención, Alonso subrayó la “vuelta a casa de Rubén”. Una sensación extraña para el nuevo responsable, “porque físicamente está todo igual” que en sus recuerdos, aunque han pasado casi 14 años. “Fui el último presidente del Insalud y el presidente del Gobierno me encargó terminar las últimas transferencias sanitarias, cosa que hicimos: ahora nos enfrentamos a una labor tan difícil como aquella”, recalcó.

Moreno remarcó que, a día de hoy, nos encontramos con un sistema que hay que mantener “cohesionado y coordinado”, la diferencia entre entonces y hoy “es que la gente ha entendido que es un sistema en el que tenemos que colaborar para seguir manteniendo el Sistema Nacional de Salud. Hay que utilizar los instrumentos para construir entre todos una forma más eficiente”.

Respecto a la posibilidad de nuevos cambios en el equipo, el secretario general aseguró que hasta ahora siempre ha tratado de colaborar con la gente que estaba en “sin tener en cuenta ni colores ni ideologías. La Administración está al servicio del Estado, que debe estar disposición de todos nosotros”. Sin embargo, apenas un día después de que Rubén Moreno asumiera su cargo, la directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa, presentaba su dimisión, la tercera renuncia en las últimas semanas, poniendo fin a una gestión rodeada de polémica, con temas espinosos como el calendario vacunal único o la retirada de la vacuna de la varicela de la oficina de farmacia.

Un sistema “mejor y más sólido”

El ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Moreno, destacó durante la toma de posesión del nuevo secretario general la necesidad de seguir desarrollando los pactos firmados con los profesionales sanitarios, y afirmó que la salud debe ser el pilar fundamental del bienestar. Entre otros puntos, pidió al secretario general que continúe avanzando en proyectos como la salud digital, la medicina personalizada y el espacio sociosanitario.

Alonso subrayó que ambos comparten los mismos objetivos y, en especial, un compromiso que pasa por hacer “mejor y más sólido” el sistema sanitario español para que “siga siendo uno de los mejores del mundo”.

Para reforzarlo, abogó por buscar diálogo y consenso, e intentar trabajar sin prejuicios con valores como la solidaridad, el esfuerzo y la capacidad de superación. Valores que ha tenido la sociedad española también en momentos difíciles en los que, incluso, el sistema sanitario español “ha seguido siendo un orgullo y un referente”.

El ministro ensalzó la trayectoria del actual secretario general, sin pasar por alto el reconocimiento al trabajo realizado “en circunstancias muy difíciles” por la ya ex secretaria general de Sanidad, Pilar Farjas.