Esther Martín del Campo Madrid | miércoles, 01 de abril de 2015 h |

La eficacia de los nuevos tratamientos contra la hepatitis C “es muy elevada”. No obstante, desde el uno de abril, los dos que cuentan con más ventaja serán las últimas combinaciones financiadas por el Sistema Nacional de Salud, ledipasvir más sofosbuvir (LDV/SOF), comercializada por Gilead como Harvoni, y ombitasvir, paritaprevir y ritonavir (OBV/PTV/rtv) y dasabuvir (DSV), comercializados por AbbVie como Viekirax y Exviera.

Es la impresión de Javier Crespo, jefe del Servicio de Digestivo del Hospital Marqués de Valdecilla y uno de los especialistas que ha participado en el grupo de expertos encargado de elaborar el plan estratégico nacional para el abordaje de la hepatitis C. El documento, recuerda Crespo, recoge los tratamientos disponibles para combatir la infección por orden de aprobación de los fármacos, sin establecer distintas líneas de tratamiento en cada caso. En realidad, asegura el especialista , “para los médicos será casi imposible establecer una preferencia de un fármaco sobre otro porque no existen comparaciones head to head, y no las habrá”.

Para genotipos 1 y 4 (GT1 y GT4) una de las mejores combinaciones es OBV/PTV/rtv + DSV, en opinión del hepatólogo, una opción terapéutica “igual de buena” que LDV/SOF o que otras combinaciones que ya existen, subraya el experto. Es cierto que en estos genotipos el que mejor eficacia ha demostrado en los ensayos clínicos, cercana al cien por cien, es la doble terapia de AbbVie, reconoce, “pero hay combinaciones que son muy buenas y tienen una eficacia similar”. En cualquier caso, recalcó, “cuando hablamos de eficacias por encima del 95 por ciento los médicos tenemos la impresión de que si algún tratamiento falla es que no se han tomado las pastillas”.

Por otra parte, Crespo defendió que la práctica clínica diaria en esta enfermedad “no es mala”. Eso sí, hizo hincapié en que tras la situación vivida en los últimos meses, es preciso restaurar la cadena de confianza, “quebrada” a varios niveles. Por un lado, los médicos perdieron la confianza en su sistema, ya que las autoridades no supieron ver el alcance de estos medicamentos que curan la enfermedad. Por otro, el aspecto más grave: que los pacientes dejaron de confiar en sus médicos.

El especialista realizó estas observaciones durante un desayuno de prensa en el que se presentaron los nuevos medicamentos para la hepatitis C de Abbvie. El director general de la compañía, Felipe Pastrana, alabó la actitud negociadora del ministerio de Sanidad. “Me encantaría que muchos países tuvieran personas preocupándose por el presupuesto igual que aquí”, destacó, sin desvelar detalles sobre los acuerdos alcanzados, sujetos a confidencialidad.

Asimismo, el director médico de Abbvie, Arturo López, subrayó que la tasa de eficacia oscila entre el 97 por ciento en GT1 y el cien por cien en GT4, con una tasa de efectos adversos próxima al 2,5 por ciento.

Informes de posicionamiento

Pocos días antes, la Agencia Española del Medicamento publicaba los informes de posicionamiento terapéutico de ambas combinaciones. El texto recoge que la combinación de OBV/PTV/rtv y DSV es el primer régimen que se autoriza sin interferón que combina antivirales de acción directa (ADD) y no incluye sofosbuvir. En combinación con ribavirina (RBV) y con una duración media de 12 semanas es una alternativa a otras combinaciones en GT1, pudiendo prescindir de esta última en determinados casos. En GT4, este mismo régimen con RBV es una alternativa.

El informe de LDV/SOF lo sitúa como la primera combinación a dosis fijas de dos ADD. En pacientes sin cirrosis, la duración media es de 12 semanas en GT1 y 4 , y de 24 en el resto de supuestos. El regimen contempla añadir RBV en cirrosis descompensada y pre o post trasplante, así como en genotipo 3.