MADRID/ La Comisión Asesora de Farmacia contará con un grupo técnico para analizar la utilidad de los fármacos en atención hospitalaria

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MÓNICA RASPAL Madrid | viernes, 27 de abril de 2012 h |

A finales del próximo mes de mayo está previsto que comience a funcionar la Comisión Asesora para el Uso Racional del Medicamento, un proyecto de la Consejería de Sanidad de Madrid que contará con un grupo técnico para analizar la utilidad de los fármacos en atención hospitalaria, así como con un jefe de este servicio que pertenezca a la Comisión de Farmacia y Terapéutica, según nos ha detallado su futuro presidente y actual director general de Gestión Económica y Compras de Productos Sanitarios y Farmacéuticos, Jesús Vidart.

Pregunta. ¿Por qué surge la idea de crear esta Comisión Asesora?

Respuesta. Es un proyecto en el que se venía trabajando desde hace tiempo dentro de la Dirección General y que se ha hecho con gran acierto en otras comunidades. Se trata de crear una Comisión Asesora de Farmacia que aglutine a profesionales de dicha disciplina y a médicos especialistas que utilicen determinados fármacos para establecer protocolos y recomendaciones, así como guías terapéuticas y de asesoramiento que estén amparadas y legitimadas por científicos .

P. ¿Cuáles van a ser sus funciones y objetivos?

R. Se va a encargar de proponer medidas de armonización en la utilización de medicamentos tanto en primaria como en especializada, además de elaborar protocolos farmacéuticos, realizar recomendaciones sobre tratamientos terapéuticos y evaluar y hacer seguimiento de los nuevos medicamentos que salgan al mercado. Para ello contará con cuatro grupos técnicos de trabajo, el de Continuidad Asistencial en Farmacoterapia, dos más de Utilidad de Medicamentos en Atención Primaria y Hospitalaria y un cuarto de Utilidad de Productos Sanitarios.

P. ¿Quién formará parte de ella?

R. Estará formada por un presidente, cargo que recaerá en el director general —no es personal—, un secretario, que será el titular de la Subdirección, y 10 vocales, entre ellos un responsable de la subdirección general, dos de asistencia sanitaria en atención primaria y hospitalaria —a propuesta de sus respectivas direcciones generales—, un responsable de la Coordinación de Continuidad Asistencial —a propuesta de la Dirección General de Atención al Paciente—, un farmacéutico de hospital que sea jefe de servicio y pertenezca a la Comisión de Farmacia y Terapéutica, otro farmacéutico de AP, un farmacólogo clínico, un médico de Familia con responsabilidades directivas y asistenciales, un especialista de Medicina Interna que sea jefe de servicio y un facultativo de la Dirección General con competencias en materia de prestación farmacéutica que será el responsable de coordinar los grupos técnicos.

P. ¿Y su funcionamiento?

R. Se reunirá como mínimo una vez al mes y nombrará al grupo técnico correspondiente cuando sea necesario analizar y hacer recomendaciones sobre un fármaco determinado, es decir, los grupos se formarán ad hoc en función del medicamento a analizar o la guía terapéutica a elaborar.

P. ¿En función de qué criterios se decidirán los fármacos susceptibles de análisis?

R. La selección dependerá de su impacto clínico, del número de pacientes a los que vaya a afectar, de las expectativas sociales generadas en estos—por ejemplo con la aparición de los nuevos anticoagulantes, que también tienen un impacto económico— o simplemente porque sea una demanda de los profesionales. Es muy importante que medicamentos de gran repercusión estén bien estudiados por los especialistas que los van a utilizar porque también tienen efectos secundarios.

P. Pero son sólo recomendaciones…

R. Sí, no son de obligado cumplimiento porque no queremos que se vea como una imposición del Servicio Madrileño de Salud (Sermas) sino que provienen de profesionales de reconocido prestigio, lo que consideramos tiene mucho valor. Además, estas guías o protocolos ya se están utilizando, simplemente es formalizar el proceso a través de una norma, de una orden de la consejería.

P. ¿En qué punto se encuentra su puesta en marcha?

R. La orden acaba de finalizar la fase de audiencia pública a entidades y grupos sociales que se pueden ver afectados (laboratorios, empresas de tecnología sanitaria, sociedades científicas, etc.). Estos han emitido sus alegaciones y propuestas, que ahora estamos estudiando y contestaremos para después pedir el preceptivo informe al servicio jurídico y que antes de finales de mayo comience a funcionar. Yo quiero que la primera reunión sea el mismo mes de publicación para establecer un calendario y nuestras estrategias de actuación.

P. Semergen-Madrid no ha respaldado su creación pues consideran que estos documentos no plasman la realidad de los médicos de AP y creen que la composición de la Comisión no es representativa de su actividad diaria…

R. Nuestra percepción es que cuando hemos ido contando la idea a los diferentes agentes sí les ha gustado y es algo que ya está funcionando en otras regiones. Sólo es poner de manifiesto lo que ya se está haciendo y que va a suponer un apoyo para todos.

Sí es cierto que alguna sociedad científica no está muy de acuerdo, pero no entiendo que digan que no se ven representados porque vamos a contar con gente de atención primaria, de hecho tienen su propio grupo técnico con médicos de familia. No van a ser cargos de la consejería.

Aunque pueda parecerlo, la creación de la Comisión Asesora de Farmacia no ha surgido a la sombra del contexto actual de recortes y control del gasto, sino que fue impulsada en 2009 por el entonces consejero de Sanidad madrileño, Juan José Güemes, y paralizada por la impugnación de Farmaindustria. La patronal alegó que abría la puerta a la imposición de restricciones a la utilización de ciertos medicamentos con el fin de reducir el gasto farmacéutico y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) dictó a su favor en noviembre de 2010 pero, tal y como señala Jesús Vidart, aludiendo solo al aspecto formal. “El TSJM determinó que no habíamos dado audiencia a los interesados, pero nosotros pensábamos que tratándose de una orden de carácter interno no era necesario”, explica. Acatando la sentencia, la consejería ha procedido a su cumplimiento, y ha vuelto a dar curso a la orden cumpliendo los requisitos de procedimiento. En esta ocasión, Farmaindustria ha propuesto en sus alegaciones participar en las resoluciones pero Vidart aclara que no es su intención burocratizar los procesos ni dictar resoluciones, que además no serían de obligado cumplimiento. Así, se limitarán a emitir las recomendaciones que ya se hacen constantemente, contando con la industria cuando les falte información sobre un fármaco, tal y como hace la Agencia del Medicamento. “No elaboraremos un catálogo de productos porque no seremos una agencia de valoración, sólo un apoyo para los profesionales ante las dudas que les surgen y que muchas veces nos trasladan”, matiza.

“No debe verse como una imposición. Tiene mucho valor que provengan de profesionales de prestigio”

“Los grupos se formarán ad hoc en función del medicamento a analizar o la guía a elaborar”