Psiquiatría/ Laboratorios Servier lanza agomelatina para el TDM

br

Resincroniza los ritmos circadianos, alterados en los procesos depresivos

A diferencia de los fármacos actuales, ni afecta a la función sexual ni engorda

| 2009-10-18T18:04:00+02:00 h |

irene fernández

Madrid

Se ha abierto en España, desde el pasado 5 de octubre, una nueva perspectiva farmacológica para el trastorno depresivo mayor (TDM). Laboratorios Servier ha lanzado agomelatina (comercializada con el nombre de Valdoxan), que ya recibió la opinión positiva en Europa el pasado mes de febrero y que, ahora, pretende hacerse con un destacado espacio dentro de las consultas españolas, tanto de primaria como de psiquiatría.

Agomelatina, el primer antidepresivo melatoninérgico, surgió, así, como una alternativa terapéutica más allá de la teoría monoaminérgica. A diferencia de los actuales antidepresivos, que presentan muchas limitaciones, sigue la hipótesis de la restauración de los ritmos circadianos, alterados en la depresión, y los resincroniza.

Los buenos resultados despejan toda duda. Su eficacia y seguridad, estudiada en un programa clínico que abarcó a un total de 5.800 pacientes adultos (tanto en estudios frente a placebo como comparativos con sertralina, fluoxetina y venlafaxina) fue muy alta. Desde la primera semana de tratamiento, los pacientes experimentaron una mejoría clínica.

Además, ha demostrado ser eficaz independientemente de la gravedad de los síntomas y ha reducido significativamente a largo plazo las recaídas. En concreto, 8 de cada 10 pacientes que tomaron agomelatina estuvieron libres de recaídas —la tasa de éstas fue de un 23,9 por ciento frente a un 49,9 por ciento con placebo—.

“No sólo actúa rápidamente sobre los síntomas de la depresión, también posee un bajo riesgo de efectos secundarios importantes, lo que provoca una mayor adherencia al tratamiento”, comentó, la semana pasada en Madrid, Ángel Luís Montejo, del Hospital Clínico Universitario de Salamanca. Y es que, este antidepresivo ni afecta a la función sexual, ni modifica el peso corporal, y ofrece un perfil de tolerancia favorable. “Mientras que el resto de fármacos sí afecta a la función sexual hasta en un 80 por ciento de los casos”, reveló.

Los próximos pasos de este fármaco que, como aseguraron los profesionales, ha sido muy bien recibido en la comunidad médica, pasarán por probar su eficacia en estudios con ancianos, que ya están en marcha, y en niños.