J. N. Valencia | viernes, 27 de abril de 2012 h |

Los impagos que sufren las farmacias valencianas, una situación que afecta también a otras comunidades, fue el gran protagonista de la jornada organizada la semana pasada por el COF de Valencia y EG, con el patrocinio de Lilly, bajo el título “Fortalezas y debilidades de la farmacia en la Comunidad Valenciana ante las enfermedades crónicas y los nuevos retos del SNS”. Y es que, poder cobrar las facturas es clave a la hora de fijar las necesidades de la botica para abordar su integración en el SNS.

A este respecto, los presidentes de los tres colegios de farmacéuticos valencianos coincidieron en remarcar la complicada situación por la que atraviesan las boticas de esta comunidad desde septiembre, que se traduce en la actualidad en el impagos por parte de la Generalitat de las facturas de enero y febrero (el pago de la mitad que faltaba de la de diciembre fue confirmado durante este encuentro por el director general de Farmacia de esta comunidad, José Clérigues). Así, la presidenta del COF de Valencia, María Teresa Guardiola, calificó los impagos como “un tsunami que no nos deja ver lo que hay más allá”, por lo que estimó de vital importancia la negociación a partir de mayo del nuevo concierto, que profundizaría en un calendario de pagos.

Por su parte, el presidente del COF de Castellón, Jesús Bellver, señaló que si la sociedad valenciana ha tenido fármacos en los últimos meses ha sido “por los esfuerzos de los farmacéuticos, algo que debe tener en cuenta la administración”. Sin embargo, vaticinó que “el hundimiento farmacia no vendrá por impagos, sino el margen real que tenemos ahora. Así no salimos y no podemos dar los servicios que damos”.

Sobre esta situación también se pronunció el presidente del COF de Alicante, Jaime Carbonell, quien incidió en que la Comunidad Valenciana no era la única que tiene este problema. Sobre este particular, precisó que en la actualidad las farmacias de esta comunidad “no valen ni lo que venden”, por lo que dibujó un futuro en el que deberán hacer “una gestión brutal, un ajuste recursos humanos, buscar financiación, gestionar mejor las compras, las ventas, optimizar…”.

Por su parte, el director general de Farmacia de la Comunidad Valenciana no rehuyó el debate sobre impagos y señaló que estos se deben a un problema liquidez desde hace diez meses, un problema común “para todas las administraciones públicas”

Modelo en peligro

Sobre este aspecto, Juan Ignacio Güenechea, vicepresidente de Cofares, señaló que el modelo farmacéutico está “más amenazado por la economía que por el derecho”, al tiempo que consideró que “pocos sectores se han sometido a pérdidas del 30 por ciento de ingresos en cuatro años”. ¿Un ejemplo? Cofares ha provisionado cinco millones de euros para hacer frente a impagos por parte de farmacias, en otros años no superaba los 500.000 euros. “Estamos al límite, no se puede mantener sistema de 20.000 farmacias remunerándolas con un 40 por ciento menos”, indicó.

Eso sí, a pesar de que los farmacéuticos son conscientes de que el modelo debe cambiar, más si cabe tras la publicación del RDL 16/2012, debe mantener, tal y como aseguró Guardiola, unos principios fundamentales: propiedad, titularidad, planificación y concertación única. “Son los principios básicos, hemos de bordear y salir de esta crisis manteniendo el modelo”, precisó.

A este respecto, en relación con el RDL 16/2012, Guardiola calificó de “lamentable” que los últimos reales decretos-ley aprobados para generar ahorro “se basen en las aportaciones de las farmacias”, ya que, según ella, “se tratan de medidas coyunturales que no han resuelto el problema”. Unas medidas que parece que no han tenido en cuenta que “en 1980 la aportación de los usuarios era de un 19 por ciento, mientras que ahora es del 5,7 por ciento. El enfermo no está pagando, pero la farmacia sí, sustituye al Estado y paga los medicamentos a todos los ciudadanos porque el Estado no cubre por falta de liquidez”, señaló.

Sobre este particular, Carbonell se refirió a la posibilidad que tienen las farmacias de establecer un catálogo de servicios. “En estos momentos se tendría que cobrar al paciente, porque de la administración no vamos a cobrar más”. Eso sí, para él, el futuro se encuentra en la Atención Farmacéutica y en otros nichos de negocio más allá de la dispensación”.

Acerca del RDL 16/2012, Clérigues señaló que la Comunidad Valenciana podrá “en los próximos dos meses identificar prescripción y situación de renta” que establece este nuevo marco legislativo. Asimismo, el máximo responsable de la farmacia valenciana se refirió a la posible desfinanciación de ciertos medicamentos que, tal y como estimó, “haría que la aportación del ciudadano pasase del 5,6 al 10 por ciento”, algo todavía lejos de la media europea.

De otro modo, se abordaron los efectos de la modificación del escalado del RDL 5/2000. Así, Enrique Granda, director del Observatorio del Medicamento, cree que el nuevo escalado “premia la mediocridad”, ya que no fomenta que las farmacias traten de aumentar sus ventas. Sobre este particular, los colegios hicieron las primeras estimaciones de lo que les supondrá la nueva escala: 1,2 millones anuales a las boticas castellonenses; cinco a las alicantinas; y algo más a las valencianas.