europa/ La salida de Amaya de CESM obliga por estatutos al cese del cargo europeo

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FEMS plantea mantener a Amaya en el cargo sin ser miembro de CESM

Wetzel: “Puede seguir como vicepresidente hasta la Asamblea de mayo”

| 2011-01-14T16:53:00+01:00 h |

josé garcía

Madrid

Cuando el 27 de octubre Javier López de la Morena, coordinador de la Federación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Femyts), comunicaba por carta a Patricio Martínez, secretario general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), el nombramiento de Julián Ezquerra como representante autonómico de Madrid en la confederación en sustitución de Carlos Amaya, no imaginaba que tal hecho podría hacer peligrar la vicepresidencia que ostenta España en la Federación Europea de Médicos Asalariados (FEMS) en la figura del propio Amaya, que lleva trabajando en la defensa de los intereses de los médicos europeos más de 16 años, desde 1994.

De acuerdo al artículo 18 de los estatutos de CESM, explica Patricio Martínez, para ocupar un puesto en FEMS es “necesario e imprescindible” formar parte del comité ejecutivo de CESM. “Como Amaya no se presenta voluntariamente a las elecciones en la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), ya no forma parte de ese comité y, por tanto, el cese según estatutos es automático”, aclara Martínez, que el pasado 20 de diciembre comunicó por carta tanto al presidente como al secretario general de FEMS el cese de Amaya como vicepresidente primero de la federación. En la misiva, Martínez expresaba su aprecio a la excelente labor y liderazgo de Amaya, lamentaba que tal situación pudiera ocasionar algún inconveniente en FEMS y comunicaba que a partir de ahora será él, como secretario general, quien asuma la representación de CESM en Europa.

Martínez, en declaraciones a GM, lamenta la pérdida de Amaya, una persona “de gran valía humana y con un conocimiento extenso y largo del sindicalismo europeo, un médico europeísta que será difícil de sustituir”. El secretario general de CESM intentó convencer al neurocirujano para que no precipitara su cese como vicepresidente primero de FEMS, ya que, además de ser un cargo electo hasta octubre de 2012, en mayo de este año la federación europea celebrará su asamblea general en Barcelona.

Ética personal

Con todo, Martínez entiende los motivos de “ética personal” alegados por Amaya y considera legítimo que tomara tal determinación. Asimismo, confía en que FEMS tenga los mecanismos oportunos desde el punto de vista estatutario para salvar la coyuntura. “Puede pasar que alguno de los vicepresidentes de FEMS asuman las competencias, que haya un proceso electoral o que se deje el cargo sin cubrir hasta nuevas elecciones”, considera Martínez.

La decisión de FEMS

Ahora bien, la pérdida de la vicepresidencia de Amaya aún no es un hecho firme. Este fin de semana se reunía el comité ejecutivo de FEMS en París para debatir, entre otros asuntos, la continuidad de Amaya. El presidente de la federación, Claude Wetzel, ha lamentado profundamente la situación ocurrida en España y ha explicado, en declaraciones a este periódico, que según los estatutos de FEMS, Amaya puede continuar como vicepresidente primero hasta la próxima Asamblea General y formar parte de la organización, junto con la delegación de CESM y el apoyo de Médicos de Cataluña, de la misma, ya que se celebrará en Barcelona el 13 y 14 de mayo.

Además, Wetzel aclara que sólo el cuerpo electoral de la entidad, el pleno de la Asamblea General, puede votar y dar una solución definitiva a los puestos ejecutivos.

Amaya, por su parte, a expensas de lo que ocurriera el pasado fin de semana en la capital francesa, no había tomado una decisión definitiva sobre su posible continuidad en la vicepresidencia. “La propuesta que hay sobre la mesa es que continúe y esa decisión no sólo dependerá de mí mismo sino del comité ejecutivo de FEMS”, explica a GM el todavía vicepresidente primero.

“Lo único que la federación europea tendría que asumir son los gastos que genere la actividad de vicepresidente primero en cuanto a alojamiento, desplazamiento y manutención. Y la cúpula directiva de FEMS está dispuesta a asumirlo”, asegura Amaya.