Gaceta Médica Madrid | lunes, 22 de septiembre de 2014 h |

El 50 por ciento de los pacientes sufre dolor en el momento del diagnóstico del cáncer, un porcentaje que crece hasta el 60 por ciento cuando empieza el tratamiento y hasta el 75 por ciento en aquellas personas en las que la enfermedad está en fase avanzada.“Vemos cómo la incidencia del dolor va progresando a medida que lo hace la propia enfermedad, y eso merece un tratamiento específico que mejore la calidad de vida de estos pacientes”. Así lo aseguró Víctor Mayoral, secretario de la Sociedad Española del Dolor (SED) y coordinador científico del curso ‘Avances en Dolor Oncológico’, durante la presentación del mismo. Durante el curso, que ha reunido a entre el viernes y el sábado a más de 200 profesionales sanitarios en el Círculo de Bellas Artes, Mayoral incluso habló de “hasta un 30 por ciento de largos supervivientes que refieren dolor a pesar de haber remitido el cáncer”.Este curso es una iniciativa promovida por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR), la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) y la SED.

El dolor oncológico suele aparecer como consecuencia de la propia enfermedad, pero también puede deberse directamente al tratamiento oncoespecífico en un 11 por ciento de los casos, excluyendo la cirugía. “Por su prevalencia e impacto emocional, hemos considerado que este tipo de dolor debía ser el eje central de esta primera edición del curso, con el objetivo de poner de manifiesto la necesidad de aplicar los nuevos avances básicos y clínicos generados en torno a él”, ha afirmado Diego Contreras, presidente de la SED. Además, “es la primera vez que se reúnen estas cuatro sociedades científicas para abordar este importante problema de salud”, añade.

Según el doctor Juan Antonio Virizuela, vocal de la SEOM, el oncólogo médico “está involucrado en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento del paciente oncológico”. Por lo tanto, “también está atento a los síntomas que puedan surgir durante todo su proceso”, explica. “El dolor es uno de los principales problemas con los que nos encontramos en nuestra práctica clínica diaria y requiere de un abordaje multidisciplinar a cargo de los diferentes profesionales sanitarios implicados”. Según este experto, “la mejor opción terapéutica contra el dolor oncológico es el tratamiento específico de la enfermedad con quimioterapia, radioterapia u hormonoterapia, si bien es cierto que muchos de estos pacientes seguirán teniendo dolor”. La analgesia será de vital importancia en estos casos.

Para el doctor José López Torrecilla, presidente de SEOR, “la idea de agrupar a las cuatro sociedades científicas implicadas en el abordaje del dolor oncológico es clave para poder llegar a acuerdos, desarrollar ideas y elaborar protocolos de actuación que redunden en un claro beneficio para los pacientes”. La radioterapia “es un tratamiento muy efectivo, pero sus resultados no son inmediatos, por lo que se requiere la utilización conjunta de fármacos analgésicos en una primera fase”, afirma. “Aproximadamente el 25 por ciento de los pacientes oncológicos recurren a esta técnica con el objetivo de paliar un dolor que condiciona su calidad de vida de manera dramática”.