Investigación/ Un cambio en sus isoformas podría ser biomarcador de fase temprana

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Estudian si su modificación también influye en el pronóstico del paciente
| 2011-01-14T16:38:00+01:00 h |

C.O.

Barcelona

Un equipo del Instituto Catalán de Ciencias Cardiovasculares (ICCC) ha descubierto un nuevo candidato a biomarcador de la fase temprana del infarto agudo de miocardio (IAM).

Se trata de la apolipoproteína J (ApoJ), a la que se ha atribuido una función antiinflamatoria, que aparece modificada en el suero tras un IAM, dentro de las primeras seis horas del dolor pectoral.

Teresa Padró, una de las investigadoras principales de este trabajo, publicado en The Journal of Proteome Research, explicó a este periódico que lo han realizado en base a estudios proteómicos, a partir de una muestra inicial de 30 pacientes. “Lo único que aseguramos de momento es que ApoJ cambia, para calificarla como biomarcador aún son necesarios muchos estudios con poblaciones más amplias”, declaró.

Esta proteína está representada en el suero por varias isoformas, y algunas cambian más que otras. “Suponemos que son cambios postrasduccionales de ApoJ, posiblemente glucosilaciones. Hay formas que están presentes en la población sana que desaparecen después del infarto, y en cambio, hay otras que están muy reducidas en personas sanas que son las que aparecen después del IAM”, concretó Padró. Es el punto en el que trabajan en la actualidad.

Influencia en el pronóstico

Por otro lado, están intentando estudiar cómo la modificación de esta proteína antiinflamatoria —que es transportada por las HDL en la sangre, al menos gran parte de ella—, puede afectar potencialmente al paciente en la evolución de su pronóstico.