| miércoles, 10 de diciembre de 2014 h |

La portavoz socialista en Sanidad, Encarna Llinares, subrayó ayer en el pleno del Senado que el Gobierno del Partido Popular “pasará a la historia como el Gobierno de los recortes, de los copagos y de la exclusión social” y reclamó al nuevo ministro de Sanidad que “aproveche esta nueva etapa para que haya un cambio de rumbo radical en la política sanitaria. Tiene que rectificar las políticas que han puesto en riesgo la salud, el bienestar y que han supuesto un aumento de las desigualdades entre los diferentes territorios”.

La senadora socialista por Alicante defendió una moción que reclamaba la derogación del Real Decreto Ley 16/2012 y solicitaba que se garantizaran los recursos suficientes a las comunidades autónomas para que pudieran poner en marcha una sanidad de calidad cohesionada y equitativa. La mayoría absoluta del PP en la Cámara Alta impidió que saliera adelante, aunque el grupo socialista recalca que se quedó solo en su rechazo a la iniciativa.

Llinares destacó la “malísima gestión” de la exministra Mato y puntualizó que su dimisión “llega tarde”. A su juicio, “estos tres años han sido tres años de recortes, de desmantelamiento del sistema sanitario y de poner en riesgo la salud de muchas personas”.

Asimismo, desmintió la idea de que el sistema sanitario en nuestro país es inviable y detalló que en el año 2011 el gasto sanitario público fue del 6,75 por ciento con respecto al PIB, una cifra inferior a la de muchos otros países europeos. “Ustedes quieren hacerlo creer para justificar los recortes porque detrás de esto lo que hay es ideología, una sanidad de calidad para quien se la pueda pagar y un sistema de beneficencia para los demás. Esta es la realidad, por mucho que ustedes se empeñen en negarlo”, apostilló.

En esta misma línea, la parlamentaria del PSOE recriminó al Gobierno que el presupuesto de salud pública y sanidad exterior se haya reducido a la mitad desde 2011 y que la previsión del gasto sanitario público en relación con el PIB para el año 2017 sea de un 5,3 por ciento, lo que supone un recorte adicional de 14 000 millones de euros.