Almudena fernández Madrid | viernes, 03 de enero de 2014 h |

Tras un 2013 marcado por el descenso de la inversión en Atención Primaria, quedan muchas tareas pendientes para el nuevo año en lo que al primer nivel asistencial se refiere.

El Consejo de Ministros aprobó en diciembre el anteproyecto de real decreto que regula la gestión y el control de los procesos de incapacidad temporal (IT) recogiendo algunos cambios que van contra el criterio de los profesionales y respecto a los que mostraron su preocupación en repetidas ocasiones. Es el caso del seguimiento de las bajas por parte de las mutuas que, tal y como señaló la ministra de Empleo, Fátima Báñez, podrán hacerlo “desde el primer día” del proceso. Sobre este asunto, no ha habido acuerdo entre profesionales y ministerio, pues el silencio administrativo se recoge en la propuesta definitiva en los mismos términos que en el último borrador, lo que implica que cuando la mutua considere que el trabajador puede desempeñar su labor, dirigirá su petición de alta a la inspección, y el silencio administrativo durante cinco días naturales supondrá el alta del mismo, algo que “perjudica al paciente” en opinión del portavoz del Grupo de IT del Foro de Médicos de Atención Primaria, Francisco José Sáez.

Y es que los profesionales no creen que los plazos que plantea el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) estén ajustados a la realidad, ya que en esos cinco días naturales, la mutua tiene que comunicar a la inspección médica que el paciente está de alta a efectos económicos, la inspección que informar al médico y éste al paciente, que puede recurrir el alta si no está de acuerdo, pudiendo coincidir además con vacaciones del profesional o días festivos, lo que lo acortaría aún más.

Sin embargo, el principal miedo de los profesionales de AP, que era el hecho de que las mutuas pudiesen tener acceso a la historia clínica del paciente, no figura en el anteproyecto aprobado, al igual que no aparecía ya en el último borrador.

El Ejecutivo se comprometió a que esta nueva normativa entre en vigor en 2014, una reivindicación histórica de los médicos del primer nivel asistencial: la modernización del control de la IT.

A punto de celebrarse la ECOE

La última prueba ECOE se celebrará el 30 de marzo de 2014 en Madrid, Barcelona y Sevilla, cerrando así el proceso tras 15 años. Esta última convocatoria será un día señalado para las sociedades de Primaria —Semfyc, SEMG y Semergen— que, aunque comenzaron por separado, concluyen ahora juntas, algo que homogeneizará a la profesión y los profesionales, que se diferenciarán unos de otros únicamente por su currículum. “De aquí en adelante, en España todos seremos médicos de familia que trabajan en Atención Primaria, y eso es importante”, aseguró Josep Basora, presidente de Semfyc.

Pero estas tres sociedades tendrán trabajo que hacer durante los tres meses que quedan para la prueba, pues en enero comenzará un curso ‘online’ a través del que formarán a los aspirantes pre-95 a la última prueba. Una formación común para todos los profesionales que desde las sociedades aseguran que será garantía de éxito, pues abordará cada una de las partes de las que consta el examen, tanto teóricas como prácticas.

Los estudiantes de Medicina tampoco son ajenos a la necesidad de cambio durante 2014 y, en lo que respecta a la Primaria, desde la Confederación Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM), su vocal de AP, Manuel Zapatero, espera que se fomente la introducción de la MFyC en las facultades “implementado asignaturas y rotatorios que permitan valorar su importancia en la medicina del día a día”, así como que se impulse su conocimiento entre los estudiantes y futuros médicos, para poder valorarla como una opción profesional.

Asimismo, las expectativas de la Comisión Nacional de Medicina Familiar y Comunitaria respecto a las plazas MIR tampoco se cumplieron en 2013, una tarea más que queda pendiente para 2014. Su presidenta, Verónica Casado, cree que es preocupante que si se analiza el porcentaje de plazas ofertadas en la última convocatoria de MIR, sólo el 27 por ciento se orienta a MFyC, con graves distorsiones territoriales que oscilan entre el 17 en Madrid y el 43 en Extremadura. Si el sistema necesita que el 50-60 por ciento sean médicos de familia según los estándares de calidad, y se está sufriendo esta desviación en formación, “los servicios de salud pueden estar mal, muy mal en pocos años”, llegando a agotarse un sistema bueno, afirmó Casado.

No es mejor el caso de la Pediatría ya que, tal y como señaló Begoña Domínguez, presidenta de la Asociación Española de Pediatras de Atención Primaria (Aepap), están acreditadas para esta especialidad 431 plazas MIR, y serán necesarios 500 profesionales a causa de las jubilaciones en la actualidad, incrementándose un siete por ciento más dentro de diez años.

Y, mientras tanto, las enfermeras que trabajan en el primer nivel asistencial ven con preocupación cómo su especialidad sigue sin estar reconocida a pesar de que serán parte responsable de la gestión de la cronicidad.