Ahorro/ El Colegio de Málaga organiza una mesa redonda para analizar la eficiencia de la dispensación de fármacos por dosis unitarias

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Los expertos cuestionan la aplicación de esta medida en el tratamiento de los enfermos crónicos, que concentran el gasto sanitario

Los médicos apuntan que, aparte del supuesto ahorro económico, su implantación aportará ventajas de tipo social en salud pública

| 2011-03-04T15:41:00+01:00 h |

Redacción

Madrid

El ajuste de la dispensación de medicamentos a las necesidades terapéuticas individuales que pretende la implantación de la unidosis en nuestro país será efectiva solo en la medida en que el paciente cumpla esa prescripción. Fue una de las ideas aportadas por los facultativos durante una mesa redonda celebrada en el colegio de Médicos de Málaga, en la que junto a farmacéuticos, y consumidores se analizó la eficiencia y viabilidad de la medida impulsada por el Ministerio de Sanidad.

Las inquietudes de los médicos fueron expresadas por Juan José Sánchez Luque, presidente del colegio malagueño, Federico Ristori, director del Defensor del Colegiado, y Aurora Puche, secretaria técnica del Área de Profesionalismo Médico de la institución. Todos coincidieron en la necesidad de efectuar un cálculo real sobre la magnitud de los excedentes que se pretenden evitar para conocer la repercusión en el gasto que podría suponer la introducción en la farmacia de sistemas de dispensación en dosis personalizadas.

De hecho, algunos especialistas cuestionaron sus posibles bondades económicas y apuntaron que el ahorro se puede obtener a través de otras vías, aunque admitieron que, al margen de beneficios económicos, conllevará ventajas en materia de salud pública.

La excepción de los crónicos

Los participantes pusieron en duda la aplicación de esta medida en el tratamiento de enfermedades crónicas, que en la práctica constituyen el grueso del gasto farmacéutico. Tanto los costes como los riesgos son desconocidos, aunque previsibles, matizaron. De hecho, destacaron que los ahorros demostrados en la experiencia piloto en la que participó el ministerio son más que discretos y no está claro que superen los costes, lo que hace que, en su opinión, existan elementos suficientes para reconsiderar la medida y valorar con prudencia su aplicación.

Para los representantes del colegio de farmacéuticos de la provincia, el sistema de dispensación a través de unidosis no es una herramienta de control de gasto. Sus portavoces defendieron que el número de unidades que contienen los envases de los fármacos que se comercializan se ajustan a la posología de su empleo y reiteraron que el coste de implantación puede ser superior a la reducción que pueda implicar en el gasto farmacéutico.

La necesidad real, en opinión de este colectivo, es impulsar una política de uso racional del medicamento que garantice que el paciente reciba el mejor de los tratamientos, garantizando el cumplimiento del mismo.

Posología adaptada

Para los portavoces de Farmaindustria, la presentación y posologías de los medicamentos ya están adaptadas, en especial en los fármacos de reciente aprobación. Subrayaron que se trata de una práctica habitual para los laboratorios farmacéuticos y reclamaron que los envases fragmentados se limiten a los fármacos en los que los tamaños estandarizados no cubran todas las terapias posibles.

Además, aunque reconocieron que este mercado pueda resultar de interés para algunas compañías, apuntaron que por regla general introduce una notable complejidad para los laboratorios.

Desde la Unión de Consumidores se reclamó la formación e información para crear hábitos que permitan asimilar mejor la nueva situación que creará la llegada a las farmacias de fármacos en monodosis.