Los requisitos que establece el plan de abordaje para la hepatitis C para que los centros diagnostiquen y traten la infección pueden ser un problema solo en un pequeño grupo de hospitales comarcales. Es la impresión de José Luis Calleja, coordinador del Libro Blanco de la Hepatología en España, que publica la Asociación Española para el Estudio del Hígado. Calleja destaca que “cualquier hospital general o incluso comarcal grande tiene especialistas en digestivo con conocimientos de enfermedades hepaticas y Fibroscan”. De hecho, insiste, “en la práctica mas de 200 hospitales en España trataban con interferon por lo que no debe ser un problema excepto en hospitales muy pequeños”.
Este mensaje debe tranquilizar a la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos, que en las últimas semanas ha alertado del “efecto embudo” que podría producirse si, finalmente, algunos centros dejan de realizar esta labor asistencial y se concentra la atención a los pacientes en los hospitales de referencia.
El plan establece que, de forma específica, los centros deben cumplir una serie de requisitos. Deben contar con médicos con amplia experiencia en el manejo de pacientes con hepatitis crónica y cirrosis hepática, tanto compensada como descompensada. Además, remarca que los pacientes con cirrosis descompensada potenciales candidatos a trasplante hepático se tratarán preferentemente en hospitales vinculados con un programa de trasplante.
Como medios complementarios disponibles deben tener Fibroscan y ecografía abdominal y además, medios complementarios accesibles que permitan la determinación rápida y seriada del ARN-VHC, del polimorfismo de la interleucina 28 B (Il28B) y el Q80K. Junto a un registro que cumpla los requisitos marcados también con el plan.
Tal y como anunció el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso a partir del uno de abril, fecha en la que entrará en vigor tras ser aprobado por un Consejo Interterritorial a finales de mes, no habrá motivo alguno para que los pacientes no reciban estos tratamientos, al ritmo que puedan asumir los especialistas. El plan de financiación para estos tratamientos planteado a los consejeros por los responsables de Sanidad y Hacienda, que contempla créditos a diez años con un interés entre el 0 y el tipo medio del Tesoro, que no computan como déficit, terminará de perfilarse en estos días con los consejeros de Hacienda.