foro/ 300 profesionales de toda España analizan y comparten las experiencias más innovadoras en el III Congreso de Gestión Clínica

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Los responsables madrileños destacan que la libre elección y el área única favorecerán la armonización de la gestión clínica en la región

La crisis económica es una oportunidad para el cambio que obliga a estrechar los lazos y a compartir objetivos entre gestores y profesionales

| 2010-10-22T17:20:00+02:00 h |

E.M.C.

Madrid

El acercamiento entre gestores y profesionales es una necesidad que, en tiempos de escasez de recursos, se hace aún más palpable. Esta demanda fue una de las conclusiones compartidas por los 300 profesionales reunidos la semana en el III Congreso Nacional de Gestión Clínica celebrado en el Hospital Infanta Sofía (Madrid) y patrocinado por Amgen, en el que también se analizó el impacto de estas experiencias en el ámbito de la primaria.

El moderador de esta mesa, Carlos López Gómez, recién nombrado director asistencial médico de la Zona Centro de la Comunidad de Madrid, subrayó los cambios en los que se encuentra inmersa la región con la implantación del área única y la libre elección, proyectos importantes que tienen, entre sus objetivos, “un incremento de la toma de decisiones en el centro de salud y un mayor desarrollo de los aspectos de la gestión clínica”. Una afirmación que enlazó con la valoración de una de las ponentes, Belén Ubach, directora asistencial médica del Sureste de la Comunidad de Madrid, que recalcó que la reorganización permitirá establecer criterios únicos en los centros con contratos programa ahora diferentes. Más adelante, advirtió, habrá que recoger las variabilidades de los centros, pero en principio se trata de armonizarlos y de diseñar una historia clínica común y un único sistema para evaluar. Ubach apuntó que los facultativos madrileños están capacitados para hacer “clínica gestionada”.

Para Daniel Ferrer, director de Servicio de Atención Primaria de Baix Llobregat Litoral, el avance de la gestión clínica pasa por la integración de la atención primaria y la especializada. “Estamos inmersos en una etapa de cambios y es preciso plantear modificaciones también en el sistema”, aseguró. Lo que supone cambios también en la relación con los ciudadanos en el contexto de una crisis económica que, en su opinión, proporciona una oportunidad para replantear la situación actual. Para favorecer esta integración, aboga por que los profesionales de primaria y especializada compartan incentivos, en función de los indicadores territoriales, así como por un cambio de modelo de financiación más capitativo. La propuesta se acerca a las ideas de Juan Carlos Contel, coordinador de enfermería de la dirección de Atención Primaria de Costa del Poniente, en Cataluña, que en su análisis defendió que los indicadores presentes en los contratos profesionales de primaria y especializada se imputen a varias partes, para obligarlas a interactuar.

Por su parte, la experiencia de Mª Ángeles Ortiz, directora de la unidad de gestión clínica de Camas, lleva a replantear el avance de la gestión clínica de abajo arriba. “Los gerentes acabarán por reconocer la utilidad de los acuerdos para mejorar la atención sanitaria”, concluyó.