Gestión/ Los pliegos de condiciones también contemplan el rescate de los hospitales

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Piden reformas en la ley para orientar las concesiones a la prestación de servicios

Las compañías, asegura Navarro, reciben ingresos fijos de la Administración

| 2010-05-28T16:22:00+02:00 h |

Esther Martín del Campo

Madrid

La crisis económica ha dibujado un nuevo escenario que favorece el avance de los modelos de gestión público-privada en los hospitales españoles. Pero después de una década de experiencia, con la fórmula del Hospital de La Ribera, en Alzira, como referente, los expertos reunidos en el marco de una jornada monográfica sobre este tema organizada por la compañía iiR España, han coincidido en reclamar cambios que permitan la adaptación de estos contratos a la nueva realidad.

En este sentido, Carmen Navarro, directora general de Gestión Económica y de Compras de Productos Sanitarios del Servicio Madrileño de Salud, pidió modificaciones en la legislación estatal para superar las limitaciones de una ley de contratos definida hacia las concesiones de obra, más que a la prestación de servicios públicos.

El perfil de los socios

Para Carmen Navarro, otro punto importante en este marco de colaboración es replantear el perfil de los socios. Hasta ahora, aseguró, han entrado principalmente constructoras, pero hay que pensar en otro tipo de compañías con una visión a largo plazo, lo que supondría, en su opinión, un buen apoyo para salir adelante en un contexto de crisis.

Precisamente, la situación económica también plantea nuevas preguntas. ¿Podría garantizarse la solvencia de los hospitales con gestión público-privada ante posibles dificultades de las concesionarias?, formuló Ignacio Riesgo, director de Sanidad de la Consultora PricewaterhouseCoopers. Riesgo incidió en que la vida económica presenta dificultades que, en cualquier caso, no cuestionan el modelo en sí. De hecho, el rescate de los hospitales está contemplado en los pliegos de condiciones, según el experto.

Carmen Navarro coincidió en que existe la opción, aunque la “Administración no tiene ningún interés en que esto suceda” y lanzó una idea más: a las empresas concesionarias “la crisis no le va ni bien ni mal, porque tienen unos ingresos anuales fijos”. No obstante, admitió que algunos socios podrían estar en riesgo en un momento dado, aunque la Administración “está ahí para controlar que no a fecte a la prestación sanitaria”, apuntó la directora general.

Desde el ámbito financiero, Ramón Ortiz, responsable de Financiación de Hospitales del Grupo BBVA, defendió la sostenibilidad de este modelo de colaboración, pero expuso que es preciso definir los riesgos y delimitar las responsabilidades, así como separar la construcción y la gestión sanitaria.

Una idea rechazada por Navarro, que aseguró que, en la práctica, esta división es imposible y daría en la línea de flotación del modelo. En lo que sí hay acuerdo es en la necesidad de redefinir los riesgos que asume cada parte, lo que, en palabras de Navarro, hay que ver sobre la marcha. En la Comunidad de Madrid —insistió— la experiencia apenas supera los dos años, por lo que es preciso observar las disfunciones que aparecen en la planificación sobre la marcha y ver las variaciones.

Una muestra del avance de estas fórmulas de gestión público-privadas es el futuro Hospital de Torrejón de Ardoz, el segundo de la Comunidad de Madrid que sigue el modelo de concesión administrativa. Mariano Guerrero, director de Planificación y Proyectos de Ribera Salud y responsable del proyecto de Torrejón de Ardoz, explicó las particularidades del centro que integrará, además, la gestión del centro de especialidades médicas de la ciudad y prestará asistencia a cinco localidades.

El portavoz de Ribera Salud destacó que tanto la propiedad como la financiación y los controles tienen un carácter público. “El modelo sólo aporta la gestión privada y nosotros no tenemos muchos de los problemas que a la gestión pública no les gustaría tener”, advirtió.

Guerrero recalcó que en este tipo de iniciativas, y a pesar de lo que puede parecer, el riesgo se sitúa en la gestión sanitaria, y no tanto en la construcción de las infraestructuras. Asimismo, subrayó la importancia de desarrollar el modelo para adaptarlo a cada situación específica.

El director de Planificación de Ribera Salud explicó que, por el momento, este proyecto no integrará la atención primaria, a diferencia del Hospital de La Ribera, gestionado por la compañía. “Nos gustaría poder abarcarlo, porque el servicio sanitario no se debe compartimentar”, defendió.

Ribera Salud constituye el 60 por ciento de Torrejón Salud, el consorcio concesionario del hospital, junto con Asisa (25 por ciento), Concesia (10 por ciento) y Fcc Construcciones (5 por ciento). Si se cumplen los plazos, algo que Guerrero destacó como “esencial y factible”, la construcción del centro finalizará en junio de 2011.