La cirugía musculoesquelética multinivel y la tecnología que aporta el Laboratorio de Análisis del Movimiento del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús, de Madrid, son dos “soluciones pioneras” de este centro en el tratamiento de niños con parálisis cerebral infantil (PCI). Con la primera, se consigue mejorar la posición postural y la marcha del paciente, mientras que con la segunda se facilita el diagnóstico y la evaluación de la patología.
Además, para el tratamiento de un paciente de estas características, es también importante contar con un equipo multidisciplinar formado por médicos rehabilitadores, traumatólogos y fisioterapeutas que se encarguen de determinar qué tratamiento es el adecuado en cada fase de la evolución.
Tal y como señala Ignacio Martínez, del Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica del Niño Jesús, “al iniciar el tratamiento del paciente del PCI, es necesario primero establecer categorías funcionales y, dependiendo de éstas, establecer una hoja de ruta y fijar las metas”. Y es precisamente en la elaboración de esa hoja de ruta donde es más necesaria la multidisciplinariedad. “Se trabaja en equipo para conseguir que la alienación del esqueleto sea la adecuada y permita al paciente mantenerse con una buena postura, controlar el equilibrio y que tenga un movimiento lo más normalizado posible a la hora de caminar”.
Posteriormente, en un momento de la vida de los pacientes que suele coincidir normalmente con la pubertad, a casi un 70 por ciento de los pacientes se les puede realizar una cirugía musculoesquelética multinivel, que puede ayudarles a ponerse de pie y/o a caminar mejor. La mayoría de estos casos, eso sí, requieren entrenamiento específico previo, siguiendo un estricto protocolo de ejercicio físico que los pacientes realizan dos veces a la semana en nuestro hospital y también en casa. Un esfuerzo aún mayor requiere la rehabilitación post operatoria, tanto en el hospital como en casa, y durante más de un año, para poder “extraer” la máxima eficacia de la intervención quirúrgica.
En cuanto a la qué pacientes son los más indicados para la cirugía multinivel, Martínez explica que la edad idónea se sitúa entre los 10 y los 14 años de edad y siempre dependiendo de qué es lo que se quiere conseguir, que en algunos casos es ponerse de pie y en otros es incluso caminar. Los resultados difieren mucho de un caso a otro, siempre dependiendo de la afectación. Lo importante es que el paciente sea evaluado de forma global para poder acceder al tratamiento más eficiente en cada momento, aprovechando las ventajas de cada tratamiento. En concreto en este centro, durante el año pasado se realizaron 25 intervenciones, ya que el Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica del Niño Jesús es desde 2010 centro de referencia en esta técnica y, por eso, en él se interviene a pacientes de todas las comunidades.
Y en todo este proceso, el Laboratorio de Análisis del Movimiento (LAM), pionero en este hospital desde su implantación en 2007, es una pieza fundamental. LAM, que consiste en un conjunto de cámaras optoeléctricas y de vídeo, una unidad de procesamiento de información, un software para la captura del movimiento y otro para la interpretación y elaboración de un informe biomecánico, se utiliza para realizar un control evolutivo de todas las alteraciones ortopédicas del miembro inferior y permite adaptar con más precisión las cirugías y la rehabilitación necesaria.