madrid/ En julio fueron rechazadas las enmiendas a la totalidad de PSOE e IU
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REDACCIÓN
Madrid
Aunque octubre será el mes definitivo para que el proyecto de libre elección y área única de la Consejería de Sanidad madrileña se convierta en una realidad, la Asamblea de Madrid aún tendrá que debatir durante septiembre —pasado el debate del estado de la región— las enmiendas parciales presentadas por los grupos que, previsiblemente, serán rechazadas.
Así lo fueron también las enmiendas a la totalidad presentadas a finales de julio por el Grupo Socialista (PSOE) e Izquierda Unida (IU) —gracias a los 66 votos que suma el Partido Popular (PP) en esta cámara— contra lo que conllevará el establecimiento de un área única sanitaria, en lugar de las 11 actuales, una normativa a la que se han opuesto frontalmente todas organizaciones profesionales de atención primaria de la región.
Sin embargo, de poco ha servido el alegato que estas entidades firmaron cuando la consejería anunció su iniciativa ni la petición de “aparcar” ésta y abordar los “problemas” que sufre la sanidad madrileña efectuada por el sindicato médico Femyts a los portavoces de Sanidad de los grupos parlamentarios.
En un duro debate en el que los diputados se lanzaron duras acusaciones con referencias a fallos históricos en sus respectivas políticas, el popular Jesús Fermosel volvió a defender el área única como el “instrumento”, no el fin, que permitirá que se eliminen trabas burocráticas para que los ciudadanos dejen de ser “tutelados” y pasen a ser “responsables y dueños” de su sistema sanitario.
