entrevista/ De Sola apuesta por la formación de los profesionales como la mejor garantía de eficiencia en la gestión de los recursos

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| viernes, 17 de septiembre de 2010 h |

Según un informe publicado por Actualidad Económica, USP Hospitales ocupa el primer puesto —compartido con Coca-Cola— de las 100 mejores empresas para trabajar en España en cuanto a la gestión del talento.

P. ¿Qué fórmulas utilizan en la gestión de los recursos humanos? ¿Con qué resultados?

R. La experiencia nos dice que la mejor estrategia que se puede aplicar en este campo es el sentido común y así lo estamos haciendo. Ponemos mucho empeño en la motivación del personal y en obtener lo mejor de cada trabajador, aprovechando su talento personal y aplicándolo a las necesidades de la empresa. Así, no nos resulta difícil hacerles copartícipes del desarrollo de ésta, ya que todos son conscientes de cómo, desde su puesto, contribuyen al objetivo común.

P. ¿Qué es lo que más valoran tanto los profesionales como los pacientes?

R. Los profesionales valoran muy positivamente el hecho de que en nuestro hospital se dé una alta complejidad diagnóstica y terapéutica y a la vez sea un centro muy accesible para quienes trabajan aquí y necesitan el apoyo de otros equipos. Los pacientes valoran sobre todo el trato profesional, muy cercano y humano. Sus demandas van en la línea de los cambios en el estilo de vida, no les sobra el tiempo y necesitan que los servicios sean accesibles y confortables. En mi opinión, irán desapareciendo muchas consultas privadas y clínicas monográficas y la fórmula que funcionará es la del centro especializado, cercano a los núcleos de población. Los grandes hospitales se convertirán en el apoyo natural a este tipo de centros.

Mónica Raspal

Madrid

Pregunta. ¿Qué acciones se están implementando en el centro para adaptarse a la coyuntura económica actual?

Respuesta. Es innegable que nuestro sector, como muchos otros, ha sido afectado por la crisis, aunque en mi opinión esto ya ha empezado a remontar. De todas formas, lo importante es que una crisis es una oportunidad para reflexionar, innovar y crecer, nos proporciona una ocasión para analizar nuestro trabajo con detenimiento y hemos aprovechado esto para buscar nuevos nichos de mercado, reubicar la plantilla evitando recortes y, en definitiva, estudiar nuevas fórmulas de gestión para mejorar la eficiencia del centro, rentabilizar nuestro trabajo y hacernos más competitivos.

También hemos puesto un especial empeño en trabajar de forma conjunta con las compañías de seguros, que son nuestros compañeros de viaje: nosotros tratamos de dar los servicios para cubrir sus necesidades en la zona y así podemos lograr acuerdos que reporten beneficios a ambos y sirvan para que demos una mejor respuesta a la demanda sanitaria.

P. ¿Cómo pueden afectar los recortes del Gobierno a la gestión del hospital?

R. Nuestro hospital tiene una dependencia mínima del sistema público, por lo que los recortes no nos han afectado de forma directa. De hecho, en cierto modo hemos salido favorecidos por la mayor disponibilidad de profesionales sanitarios que ahora no tienen cabida en los hospitales públicos.

P. ¿Cómo gestionan los medicamentos y productos sanitarios del centro?, ¿qué mecanismos han puesto en marcha para ganar en eficiencia?

R. La eficiencia va de la mano de una buena formación del personal. Apostando por los mejores profesionales garantizamos en primer lugar que el uso de los medicamentos y los productos sanitarios del centro se gestione de la forma más adecuada. Nuestro Departamento de Compras, por otra parte, aporta su experiencia de gestión tanto en la negociación de los precios como en el control del stock.

De lo que no soy partidario es de aplicar una “ingeniería financiera” basada en el retraso de los pagos o en el manejo del activo circulante que, en definitiva, sólo consigue trasladar los problemas de una empresa a otra.

P. En cuanto a la investigación, ¿qué proyectos tienen puestos en marcha y en qué áreas?

R. Contamos con muchos profesionales con vocación investigadora, fundamentalmente centrada en la investigación clínica. Ahora mismo tenemos líneas abiertas de investigación en Neumología —para la detección precoz del cáncer de pulmón—, en Otorrinolaringología —relacionadas con el tratamiento del ronquido—, así como en técnicas poco invasivas en Traumatología, tratamiento de la enfermedad inflamatoria intestinal en Aparato Digestivo, el estudio y tratamiento de arritmias en Cardiología y también en radiología intervencionista, diagnóstico fetal y Oncología.

P. ¿Cómo se mantiene la excelencia en la calidad asistencial?

R. Es un trabajo de día a día, muy vigilado por la dirección del centro y apoyado por una buena selección de profesionales y por los diferentes servicios del hospital. Hay programas de calidad supervisados por un responsable de Calidad, de forma que existen una serie de protocolos que se aplican a todos los procesos (médicos y no médicos) que se llevan a cabo en el centro. Esto garantiza que cada actividad que se pone en marcha tiene un seguimiento y que hay un análisis que permite evaluar y mejorar de forma constante.

P. ¿Cuáles son los retos más inmediatos del centro?

R. Queremos afianzarnos como el hospital privado de referencia en Andalucía Oriental, para lo cual nos esforzamos por adecuar nuestro funcionamiento a las mejoras constantes que ofrece la medicina y por buscar una gestión cada vez más eficaz que nos garantice el apoyo de los accionistas y así seguir creciendo.

P. ¿Qué peticiones le hace a la Administración sanitaria?

R. Debería dar un mayor reconocimiento a la importancia que el sector de la medicina privada tiene en la economía de la región, ya que es un motor de desarrollo para otras empresas como las del sector turístico. Los turistas de hoy se informan mucho al elegir un destino y también miran la oferta sanitaria.

El desarrollo de las comunicaciones permite que haya un gran flujo de información en este sentido y esto nos obliga a ser cada vez competitivos. Hemos pasado de ser exportadores a importadores de pacientes que aprovechan sus vacaciones para venir a Marbella a tratarse alguna enfermedad, a hacerse sus chequeos anuales o a visitar a su médico de confianza. Esto es un orgullo y a la vez una responsabilidad.

No se puede bajar la guardia y tenemos que seguir creciendo y mejorando para continuar con esta importantísima contribución a la economía, por lo que nos gustaría que se agilizasen todos aquellos procedimientos administrativos que a veces frenan este desarrollo. Por último, sería interesante que los profesionales de la medicina privada tuvieran al menos el mismo trato por parte de la Administración y de los colegios de médicos que los que trabajan en la sanidad pública.