28º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Fertilidad
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Las complicaciones del síndrome de ovario poliquístico pueden restar entre 10 y 15 años de vida a la mujer
Nueve de cada diez mujeres que piden consejo sobre técnicas de preservación de la fertilidad recurren a ellas
T. Martínez
Valencia
El síndrome de ovario poliquístico (SOP) que afecta a entre el 5 y el 10 por ciento de las mujeres españolas, y su relación con otras patologías, ha centrado la reunión de la Sociedad Española de Fertilidad.
Según los expertos reunidos en Valencia, “las mujeres con SOP tienen más riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares en el futuro”, lo que hace que este sea uno de los principales retos a los que se enfrenta la especialidad en los próximos años.
La presencia del síndrome de ovario poliquístico va unida al desarrollo de trastornos en la actividad de la insulina y, como consecuencia de ese rasgo de alteración de la sensibilidad a la insulina, las mujeres que padecen SOP tienen tendencia a la obesidad, a la diabetes y al aumento de los trastornos de los lípidos. “Todo ello hace que estas mujeres tengan mayor probabilidad de padecer enfermedades como el infarto de miocardio, la cardiopatía isquémica y afecciones vasculares del sistema nervioso”, apunta Alberto Romeu, ex jefe de Servicio de Ginecología y del Hospital Universitario La Fe de Valencia.
La presidenta del comité organizador del encuentro, Ana Monzó, destacó que las mujeres afectadas por esta patología presentan mayor cantidad de andrógenos de lo normal, ciclos menstruales irregulares y largos y, en la mayoría de casos, una falta de ovulación que puede producir esterilidad. Estas mujeres, explicó la doctora Monzó, tienen más riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares en el futuro, “algo de gran relevancia si tenemos en cuenta que la primera causa de muerte en mujeres posmenopáusica es la cardiopatía isquémica”.
Además de con las enfermedades cardiovasculares, el síndrome de ovario poliquístico se ha asociado a determinados tipos de cáncer de tejidos hormono-dependientes, como el endometrio.
Por todo ello, según el doctor Romeu, “lo más importante es que las mujeres con SOP acudan a un médico que les advierta del riesgo de esta enfermedad si la mujer tiene un aumento de resistencia a la insulina o un problema metabólico, además de tener siempre presente que, si no se trata correctamente, esto puede restarle entre 10 y 15 años de vida y provocarle un accidente cardiovascular”.
Asimismo, aunque los últimos avances en reproducción asistida hacen que para las mujeres con SOP el embarazo sea una realidad, los expertos alertan del riesgo de abortos espontáneos por los trastornos hormonales y metabólicos que tienen este tipo de pacientes.
Técnicas de preservación
Uno de los temas que se trató en el encuentro fue el de las técnicas disponibles en la actualidad para preservar la fertilidad en los casos en que ésta se ve amenazada, entre las que destaca la criopreservación de tejido ovárico. Según explica la doctora María Sánchez, responsable del Programa Valenciano de Preservación de la Fertilidad, “son varias las ventajas ya que, una vez extraída la corteza ovárica para su posterior implante, no es necesario retrasar la quimioterapia o la radioterapia, tampoco precisa el uso de hormonas, puede realizarse a cualquier edad y provee de función ovárica a la mujer, algo muy importante para la paciente, pues retrasa el inicio de una menopausia precoz”.