br
El hecho de que la obesidad conviva con el cáncer de mama supone un incremento del 30 por ciento de riesgo de reaparición del tumor y un 50 por ciento del riesgo de muerte prematura, a pesar del tratamiento óptimo.
Así lo sugiere un estudio publicado en Cancer, liderado por el equipo de investigadores de Joseph Sparano, del Colegio de Medicina de Albert Einstein del Centro Médico de Montefiore (Nueva York, EEUU). En él se comparó el estado de pacientes obesas y con sobrepeso con otras de peso normal, en un extenso grupo con cáncer de mama en estadio I-III.
Todos los ensayos excluyeron a pacientes con otros problemas de salud significativos, de forma que quedaba separada la influencia de la obesidad de otros factores que afectan a la recurrencia del cáncer y a la supervivencia.
Los investigadores observaron que el índice de masa corporal creciente aumentó significativamente el riesgo de recurrencia del cáncer y la muerte, de forma independiente a la administración de un tratamiento adecuado, que incluía quimioterapia y terapia hormonal. Estos resultados solo se dieron en las mujeres con cáncer de mama con receptores hormonales positivos, el tipo más frecuente.
Por tanto, “las estrategias de tratamiento dirigidas a interferir con los cambios hormonales y la inflamación, causados por la obesidad, pueden ayudar a reducir el riesgo de recurrencia”, puntualiza Sparano.