Cohesión/ Jiménez insiste en que se trata de un borrador, un documento técnico de trabajo, y que los acuerdos se concretarán en el CISNS
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El ministerio olvida incluir en el documento anexo con aportaciones del sector las de los consejos de médicos, enfermería y farmacéuticos
Martínez Olmos asegura que las sugerencias de las organizaciones colegiales también se recogen en documentos que no han trascendido
Esther Martín del Campo
Madrid
El Pacto por la Sanidad parece haber entrado en la recta final, pero el esfuerzo que supone el sprint, alentado desde el ámbito político y el sector sanitario, que aboga de forma unánime por no demorar más un acuerdo necesario, puede dejar en un mero diagnóstico o una simple declaración de intenciones lo que en principio se planteaba como una base sólida para dar sostenibilidad y cohesión al sistema sanitario.
Los consejeros de las comunidades autónomas tienen ya en sus manos un documento que recoge un centenar de propuestas formuladas por los seis comités institucionales que trabajan en el pacto, tal y como avanzó recientemente en el Congreso el secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos (ver GM nº 312) y ha refrendado la semana pasada la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez.
Una treintena de páginas a las que ha tenido acceso este periódico, en las que los comités, integrados por responsables de las comunidades autónomas y el ministerio, plantean una propuesta de consenso en cada una de sus áreas: recursos humanos; cartera de servicios y centros de referencia; racionalización del gasto sanitario; políticas de calidad e innovación; políticas de salud pública; y políticas de salud sobre drogas.
Junto a este documento, el ministerio ha proporcionado a las comunidades un informe adicional que recoge las propuestas de mejora de los agentes interesados en el pacto, en el que hay ausencias muy destacadas como la Organización Médica Colegial o los Consejos Generales de Enfermería y Farmacéuticos. Eso sí, no faltan las de otros grupos como las asociaciones de alérgicos al látex o de afectados por lupus, en representación de los pacientes. Según este documento, se habría solicitado la opinión a 122 organizaciones, de las que sólo 24 contestaron.
Sin embargo, en este mismo documento hay ausencias de organizaciones que han confirmado que enviaron sus ideas. Y es que las prisas no son buenas consejeras. Desde el Consejo General de Enfermería aseguran que hicieron llegar un documento extenso en el plazo marcado, que no aparece en este informe. Todo apunta a un error del ministerio. Según su presidente, Máximo González Jurado, José Martínez Olmos ha pedido disculpas por ello, y ha pedido al consejo que comparezca ante el congreso para explicar sus ideas.
La Organización Médica Colegial también puntualiza que envió sus aportaciones a principios de año, pero en el ministerio no acaban de tenerlo claro y la información es dispar. Mientras algunas fuentes confirmaron en un primer momento a GM que la OMC no envió sugerencias, Martínez Olmos puntualizó poco tiempo después a este periódico que las valoraciones de todas estas entidades colegiales están recogidas en otro documento diferente, que no ha trascendido aún. Un informe adicional en el que también deberán estar las ideas sobre el pacto del Consejo General de Farmacéuticos, que también ha constatado su participación.
Un borrador técnico
Pero más allá de lo anecdótico de la tramitación, es el fondo, y no la forma de la propuesta de consenso de estos comités institucionales, lo que no satisface las expectativas. Los principios de acuerdo que recogen —en el cuadro aparecen los más destacados de los cuatro comités principales— sólo permiten realizar una composición de lugar, un análisis de las carencias del sistema sanitario.
Apenas 24 horas después de conocer el documento, la coordinadora de Participación Social del Partido Popular, Ana Pastor, mostraba abiertamente su decepción. “No plantea ni una sola alternativa”, aseguró, insistiendo en que han pedido a la ministra un pacto por la estabilidad y la sostenibilidad, pero un pacto con contenido.
Desde el Ministerio de Sanidad, Trinidad Jiménez insiste en que se trata de un borrador, un documento de trabajo de carácter técnico, en cuya elaboración han participado todas las comunidades autónomas sin excepción. Una idea que refuerza José Martínez Olmos, que ratifica que las propuestas han sido pactadas por los miembros de los comités institucionales, integrados por miembros del ministerio y las comunidades autónomas, letra por letra. Equipos, en definitiva, en los que están representados políticos de distinto signo, entre ellos los populares.
Jiménez afirma con contundencia que el proceso no ha concluido: “El texto se ha enviado a los consejeros para que cuando nos sentemos podamos hacer las aportaciones definitivas que eleven esas propuestas técnicas a la entidad de acuerdo político, y ahí se hablará decisiones y medidas concretas”.
La ministra está convencida de que el proceso será un éxito debido al clima de consenso reinante y a la lealtad y trabajo permanente para cerrar el pacto. “Nadie de ninguna comunidad me ha mostrado su disconformidad o incomodidad con los trabajos que estamos realizando”, puntualizó.
“Hace falta trabajar con tranquilidad y solvencia para no quedarnos en un mero documento, y en eso estamos, para hacer una propuesta que suponga un punto de inflexión”, subraya Jiménez, que hace hincapié en que se están abordando cuestiones de envergadura y trascendencia, con gran efecto en la sostenibilidad del sistema y en la calidad asistencial.
