Julián Ezquerra no duda de que la jubilación la pasará en La Rioja, disfrutando de su tierra, de su gastronomía y el buen vino. Pero, hasta que llegue ese momento, el secretario general de Amyts opta por la ‘caña’. La que ha dado y dará contra las injusticias en el mundo real y en el virtual.
Pregunta. De apellido Ezquerra (izquierda en euskera) y sindicalista. ¿De raza le viene al galgo?
Respuesta. No, en mi familia no hay antecedentes, nadie se ha dedicado a la defensa de los profesionales.
P. Julián Eskuin (derecha en euskera), ¿sonaría igual de bien en el ámbito sindical?
R. En la organización que yo represento no hay de izquierdas, ni hay de derechas, ni hay arribas, ni hay abajos, como dicen ahora los de Podemos. Representamos por igual a todos los facultativos, por lo que mezclar Amyts con ideología política no tiene sentido.
P. Creo que tu espíritu reivindicativo viene de lejos. En la Facultad no solo hiciste la carrera de Medicina…
R. Empecé Medicina en el 74, siendo un estudiante aplicado, sin suspensos. Fueron los últimos años de Franco y viví todos los acontecimientos de aquella época: carreras con la policía, cierre de la universidad, incursiones de la policía en las facultades, bibliotecas… Esa época convulsa la viví de lleno. Era joven, estudiante y además estaba en el seno de las protestas, en la universidad.
P. ¿Qué tal hubiesen congeniado por aquellos tiempos las mareas blancas con las mareas ‘grises’?
R. Difícilmente hubiesen congeniado porque en aquella época plantear un fenómeno como el de las mareas blancas en que miles y miles de compañeros, ciudadanos, pacientes, salimos a la calle a protestar, era impensable. Si veían a cualquier grupito de más de cuatro personas por el campus ya podían decir “disuélvanse, señores”.
P. Médico sindicalista metido de lleno en el universo 2.0. ¿Qué es más efectivo, un megáfono o un blog?
R. El megáfono está pasado de moda, aunque en ciertos momentos haya que utilizarlo, por ejemplo, en una asamblea en un hospital. Indudablemente estamos en el tiempo del 2.0 y el que no entienda que las redes sociales son el camino y la forma de llegar, sobre todo a los jóvenes, que es nuestro colectivo ahora más numeroso, está muy equivocado.
P. ‘El criticón de Julián Ezquerra’, ¿te haces o te hacen llamar?
R. Inicié el blog ‘El criticón de Julián Ezquerra’ heredando otra cosa que yo hice en su momento, una especie de tríptico que elaboraba, que era ‘El criticón de Quijorna’. Yo soy médico de familia con mi plaza en un ambiente rural, como es Quijorna, del cual me siento muy orgulloso, porque he pasado etapas maravillosas de mi vida profesional allí, y fue donde empecé con aquello del criticón. Ahora lo he retomado después de 15 años y he hecho este blog porque me gusta criticar desde mi posición todo lo que se mueve alrededor sobre lo que me interesa, pero procuro no meterme en demasiados fregados políticos para representar a todos los profesionales.
P. A las injusticias les das la espalda… Al deporte también se la has dado en el sentido más literal, ¿no?
R. Efectivamente, la espalda me hace darle la espalda. He tenido una intervención quirúrgica de urgencia por una hernia discal que me ha tenido apartado de la actividad deportiva durante estos meses. Espero poder retomarla, yo siempre he sido jugador de fútbol, me ha gustado jugar al tenis, he hecho mucha bicicleta de montaña, pero por razones de edad, por razones de tiempo, y ahora también por razones físicas, todo esto lo tengo abandonado.
P. ¿Qué victoria recuerdas más?
R. Recuerdo sobre todo dos grandes fracasos de mi equipo. Como soy del Atlético, recuerdo las dos finales de Copa de Europa perdidas en el último minuto. A nadie se le escapa que como amante del fútbol, la Eurocopa o el Mundial de la Selección Española siempre lo vamos a tener ahí grabado.
P. Creí que mencionarías otra victoria, no deportiva precisamente, la del 17 de febrero de 2014…
R. Fue una victoria indudable de la sanidad pública, de la cual yo me siento copartícipe porque esta organización, junto con AFEM, con un gran esfuerzo económico, conseguimos que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid paralizase el disparate absoluto que se quería hacer.
P. ¿Consideras que la consejería de Javier Maldonado está ‘regateándoos?
R. Javier Maldonado es un consejero de paso que no se va a meter en grandes cosas. Los grandes temas pendientes que tenemos en este momento por solucionar en la sanidad de Madrid, y sobre todo en el ámbito del profesional, se escapan del ámbito de la consejería, están en la Puerta del Sol y son decisiones que se tienen que tomar desde Presidencia.
¿A quién expulsarías del campo sanitario?
Al que haga negocio de lo innegociable.
Si la sanidad fuese un partido, ¿cuáles serían los dos equipos? Uno de los gestores y políticos, que se deben al que les nombra, y el otro de los profesionales que hacemos posible que los pacientes sigan teniendo en la sanidad pública española un referente. Me encantaría que se uniesen e hicieran un equipo conjunto en el que se jugase con los mismos objetivos, pero hoy está muy lejos.
¿Ves un vencedor? Los profesionales hemos ganado el primer tiempo, nos falta la segunda parte del partido en la que será un profesional de la gestión el que dirija las organizaciones sanitarias.