Las NOX forman una familia de enzimas capaces de producir estrés oxidativo, que median un gran número de procesos celulares. Y lo que hacen desde el laboratorio de Claves Biológicas del Fenotipo Invasivo y Metástatico del Idibell, dirigido por la investigadora Isabel Fabregat, es estudiar las funciones de las NADPH oxidasas (NOX) en la fisiopatología del hígado.
Según han publicado en la revista Free Radical Biology and Medicine, la inhibición de NOX4 en células tumorales hepáticas aumenta su capacidad proliferativa y por tanto su capacidad tumorogénica, lo que les empuja a sugerir que NOX4 puede ser un supresor tumoral en el hígado.
En análisis in vivo en ratones, el estudio revela que la expresión de NOX4 se encuentra desregulada en situaciones fisiológicas proliferativas del hígado, tales como la regeneración después de la hepatectomía parcial, así como durante condiciones proliferativas patológicas, tales como la hepatocarcinogénesis inducida por dietilnitrosamina.
Asimismo, en esta investigación han comprobado que las células tumorales hepáticas presentan una expresión menor de NOX4 que las células normales.
Actualmente existe un interés por encontrar fármacos inhibidores de NOX4 ya que se ha descrito que esta enzima está implicada en fibrosis hepática, y con este nuevo estudio, se profundiza en los efectos que la inhibición del NOX4 puede tener en la fisiopatología del hígado, como puntualiza Fabregat.