gestión/ El observatorio de nuevas ideas planifica la implantación de los cambios
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El Gregorio Marañón presenta el primer centro en un servicio de Farmacia
El departamento del hospital madrileño es pionero en certificación ambiental
Esther Martín del campo
Madrid
Para mejorar es imprescindible compartir experiencias y comparar resultados. Sobre esta base, el Servicio de Farmacia del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid ha dado a conocer a los responsables de unidades de toda España su particular centro de innovación. Un banco de pruebas coordinado por Ana Herranz, que explica a GM las líneas de esta iniciativa denominada i-Pharma.
El objetivo es convertirlo en un observatorio de nuevas ideas y prácticas que puedan surgir en este entorno y apoyar a los miembros de las unidades clínicas o de otros equipos del hospital para que se consoliden en proyectos a largo plazo, asegura la especialista. De este modo, subraya Herranz, lo que se presenta es una metodología de trabajo acumulada durante años que ha llevado a sus responsables a la conclusión de que cuando existe una idea o un punto de mejora, antes de planificar el cambio, se pone en marcha un proceso de investigación para estimar si resultará positivo y, después de ello, establecer un cronograma de implantación y un equipo de seguimiento.
“Creemos que es el primer centro de este tipo en los servicios de farmacia españoles. La idea ha sido bien recibida por el resto de compañeros”, indica la coordinadora, que apunta que con este sistema se logra que las innovaciones que se adaptan vayan mejor avaladas y se cumplan mejor los pasos y compromisos de implantación.
El centro de innovación del servicio de Farmacia del Hospital Gregorio Marañón es solo una de las iniciativas pioneras que fueron presentadas durante el V Encuentro de Innovación en Gestión Clínica organizado por este hospital. María Sanjurjo, jefe del Servicio, explica a este periódico las novedades presentadas en esta edición.
Sanjurjo destaca la apuesta por las nuevas tecnologías en la preparación y la administración de medicamentos, con herramientas como el registro electrónico de dispensación de enfermería ligado a la prescripción médica y a la administración de farmacia o el empleo de bombas inteligentes de infusión que bloquean el dispositivo si registran errores de programación.
Otra baza importante del servicio de Farmacia de este hospital es la apuesta por la calidad. A la acreditación por la norma ISO 9001—explica la responsable— se suma ahora la certificación ISO 14001 de gestión ambiental, que atesora las buenas prácticas en la gestión de los residuos. “Somos el único servicio de farmacia de España que tiene implantado un certificado de gestión ambiental”, indica Sanjurjo.
El tercer apartado pasa por mejorar la formación de los profesionales en relación a los medicamentos. Para ello, explica la jefe de sección, se está implantando una plataforma de e-learning para completar la formación del personal de enfermería del hospital que funciona como formación acreditada. El primer módulo, que ya está validado, abordará la formación en dispensación robotizada de los fármacos. Esta labor formativa es una de las actividades integradas dentro del centro de innovación del servicio.
Otra de las novedades más importantes del Servicio de Farmacia del Hospital Gregorio Marañón es la incorporación de un cuadro de mando para analizar la rentabilidad a una estructura directiva tradicional con cuatro pilares fundamentales: asistencial, gestión económica, docencia e investigación. “El principio de todo es la selección de los medicamentos que se van a utilizar y la protocolización”, insiste Sanjurjo. “Es esencial que estas bases funcionen bien, para lo cual resulta básico que exista una Comisión de Farmacia y Terapéutica muy potente con la que el servicio de Farmacia trabaje de la mano”.
En esa colaboración inicial se gesta la aportación de estos departamentos a la sostenibilidad del centro y, por extensión, del propio sistema sanitario. Alianza que también se plasma en el resto de procesos, como la adquisición de medicamentos. En este punto, la jefe del Servicio de Farmacia destaca las dificultades para realizar una buena gestión de compras para mejorar la eficiencia en los hospitales, teniendo en cuenta que, por ejemplo, en el centro el 80 por ciento del gasto se debe a principios activos monopolistas, un porcentaje que sube hasta el 90 si se tienen en cuenta los medicamentos que tienen dos o tres proveedores. “Para ganar en eficiencia, es imprescindible hacer políticas de equivalentes terapéuticos”, insiste la farmacéutica. “Al barajar fármacos que son equivalentes tenemos en cuenta los costes de tratamientos por año por paciente en las distintas alternativas terapéuticas que han demostrado su efectividad —apunta—. Nuestra labor es seleccionarlos muy bien con criterios de rentabilidad y eficiencia y realizar una buena política de adquisiciones”.
La eficiencia en la administración de los fármacos también supone una contribución del servicio a la economía del centro. En este punto, María Sanjurjo pone el acento en el acondicionamiento de los medicamentos antes de su administración al paciente. Como ejemplo, la responsable cita los fármacos empleados en oncología, donde las mezclas intravenosas de muchos de ellos se dosifican por peso o por superficie corporal y no utilizan viales completos. La solución, en opinión de la especialista, pasa por una preparación centralizada, de modo que se pueda tratar a varios pacientes sin desperdiciar excedentes en los viales. Junto con la selección de los medicamentos, la eficiencia en la administración de los viales es uno de los puntos en los que más se ha volcado el servicio, ya que suma cifras importantes de cientos de miles de euros.
La seguridad del paciente también enlaza con la optimización de los recursos económicos. “Además de las repercusiones clínicas para el paciente, también tiene un impacto económico en el sistema sanitario”, matiza Sanjurjo. En este terreno, la artillería del servicio de Farmacia pasa por el empleo de nuevas tecnologías en toda la fase de prescripción, ligado a sistemas de ayuda a la decisión y a las bases de datos de los laboratorios de análisis clínicos, bioquímica y microbiología clínica del hospital.
