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La principal demanda del médico de AP está ligada a la adecuación y asignación de recursos para disponer de más tiempo en el trabajo
Desde la Svmfyc exigen que el aumento de la capacidad de resolución debe ir acompañado de una adecuación de los recursos disponibles
Toni Martínez
Valencia
Aunque al flamante nuevo presidente de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria (Svmfyc) no le gusta oír quejas, ni quejarse, sí que denuncia que su especialidad “continúa viviendo un ‘hospitalocentrismo’ que dificulta aún más el cumplimiento de los acuerdos AP-21 firmados por el ministerio con todas las consejerías, algo que debería ser la prioridad en este momento”. Impulsar esos acuerdos es uno de los ejes del mandato que inicia estos días.
Y es que para Freixas, aunque se ha realizado un esfuerzo importante en alguno de los puntos como son la dispensación electrónica, el plan antiburocrático o el aumento de capacidad de resolución de los equipos de atención primaria, “queda mucho por hacer de ese acuerdo consensuado por la consejería y las sociedades científicas y colegios profesionales de atención primaria para cumplir con lo que firmamos en 2007”.
En este sentido, asegura como ejemplo que “un aumento de la capacidad de resolución debe ir acompañado de una adecuación de recursos; una exigencia en cambios organizativos o políticas de coordinación y comunicación adaptados a las necesidades, deben ir acompañadas de fomento del estatus de los coordinadores o jefes de zona básica; y una exigencia en cumplimiento de objetivos y calidad asistencial debería ir acompañada de posibilidad de autonomía presupuestaria”.
La importancia, cada día mayor, de la atención primaria como puerta de entrada del sistema sanitario ha hecho que en los últimos años se haya ampliado sus capacidades para realizar más pruebas, una situación que muchas veces no tiene aparejada la disponibilidad que requiere el equipo de AP, según critican los médicos de familia.
Pero hay otras trabas a las que tendrá que hacer frente Freixas como presidente de la Svmfyc, como el hecho de que con la crisis hay más problemas para conseguir sustitutos. En este sentido asegura que “la demanda nos come, nos dificultad realizar acciones de prevención que es la labor principal que deberíamos tener, nos dificulta y nos impide hacer labor de investigación, la docencia; tenemos que hacer un esfuerzo para coger un hueco para ello”.
Además, el nuevo presidente de la Svmfyc señala que “en estos tiempos que vivimos, hay que valorar aún más la eficiencia de las intervenciones y es conocido que la inversión en AP es la más eficiente por lo que los recursos deben ir dirigidos a adecuar el ratio poblacional por médico y a incentivar la calidad ofertada”.
Estas peticiones se basan en que el año pasado, atención primaria asumió el 84 por ciento de las consultas, pero con un presupuesto del 15 por ciento. “Si hubiese una gestión única con ideario común estaría claro dónde debería ir el dinero”, señala Freixas.
Carrera profesional
Otra de las críticas es que la carrera profesional no se desarrolla como debería. Al respecto, Freixas señala que “aunque están las bases puestas, no hay nada en la práctica. Actualmente, lo único que se valora es el tiempo trabajado, cuando la carrera debería ser un estímulo para la formación continuada del profesional y ahora mismo sólo es una forma de premiar la antigüedad”.
Pese a las críticas, desde Svmfyc se muestran esperanzados en la aprobación de la asignatura troncal (obligatoria) de Medicina de Familia en 17 facultades de Medicina para quinto curso, una de ellas en la comunidad para el curso 2010/2011. “Es una gran noticia, pues supone que los estudiantes tendrán un conocimiento más cercano de la Medicina de Familia, cosa que hasta ahora no sucedía ya que el único contacto que tiene el estudiante con la Medicina de Familia son 15 días de práctica en el tercer curso”, recuerdan desde la sociedad.