Juan Fernández Moreno, presidente de la Asociación Catalana de Enfermos de Hepatitis (Asscat) comenta a GM, que recientemente se ha llevado a cabo la presentación del proyecto “Plan de Acción de prevención de la Hepatitis C. 2015-2019” por parte del Departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña, en el que esta asociación de pacientes ha sido invitada a participar en calidad de expertos.
Pregunta. ¿Cuál es la situación actual de los pacientes con hepatitis C en Cataluña?
Respuesta. En Cataluña existe mucha controversia por dos cuestiones fundamentales. Por una parte, llevamos todo un año a la espera para acceder a los nuevos tratamientos. Pero, se da la circunstancia de que estos nuevos fármacos son tres veces más caros que los que habían hasta ahora, generando una gran inequidad. A esto se suma, que los medicamentos que estaban disponibles en el mercado también son caros y por tanto, tampoco recibimos. Esta situación ha generado una angustia porque creemos que vamos a tener menos acceso aún que antes.
P. La Consejería de Sanidad de Cataluña le ha invitado a participar de un Grupo de Trabajo en calidad de experto. ¿Podría decirnos de qué se trata?
R. Lo que Cataluña ha hecho es que, al estar transferida la Sanidad a cada Comunidad Autónoma, a los enfermos de hepatitis C se nos ha incluido en el “Plan Nacional de Hepatitis” a nivel estatal. Al estar transferida el tema de Sanidad a las comunidades autónomas, Cataluña por sí misma en colaboración con la farmacéutica Janssen, ha creado lo que ha llamado el ‘Plan Nacional de Hepatitis virales’. En este sentido, se han creado tres líneas de trabajo en la cual Asscat es la única asociación experta en Hepatitis C que va a trabajar en estos tres grupos de trabajo. Un grupo va estará orientado a las acciones preventivas y de diagnóstico precoz, la reducción de la infección relacionada con el tema de asistencia sanitaria. El segundo grupo, por su parte, se encargará de la mejora de la calidad asistencial del paciente crónico en hepatitis C, y por último, la tercera línea estará dirigida al tema de los cuadros de mando para poder ejercer y poner en práctica las dos primeras líneas.
P. ¿Cómo considera que se puede mejorar la calidad asistencial del paciente crónico en hepatitis C?
R. La calidad asistencial en Cataluña en general consideramos que es buena, también hay que decir que todo depende del hospital o del centro sanitario al que se acuda. Sabemos que la empatía de los propios pacientes con los diferentes hematólogos es buena, pues hay muchos de estos profesionales que son muy receptivos y explican ampliamente la enfermedad, cuales son los problemas y los diferentes tratamientos disponibles. Pero también se encuentran otro tipo de profesionales que pueden no ser tan receptivos en este caso dejan correr la enfermedad, cosa que no hay que hacer porque evidentemente esto es una situación que puede llevarte a la muerte. Lo que sí está muy claro es que en Cataluña la sensibilización del tema de la hepatitis C se está viendo y se está percibiendo por parte de los jefes de las unidades de hematología de los diferentes hospitales.
P. ¿Qué espera como resultado de este grupo al que ha sido invitado a participar en conjunto con la consejería de Sanidad?
R. Esperamos esto sea una estrategia nacional que empiece por Cataluña, un plan comunitario de manejo y de abordaje para los pacientes con hepatitis C, es decir no solamente ponernos a realizar todas la planificaciones, estudios y logística, si no que luego sea implantado realmente en los centros de atención primaria, que es lo más básico y lo más cercano al ciudadano, para poder detectar a aquellas personas que padecen esta enfermedad y no lo saben. Estamos hablando de que en España hay unos 900.000 afectados, y sólo en Cataluña hay unos 300.000, de los cuales se podría decir que 200.000 no saben que padecen esta patología, que al no saberlo involuntariamente produce una cadena de trasmisión y de infección.