Gaceta Médica Barcelona | miércoles, 10 de febrero de 2016 h |

Un equipo de investigadores ha descubierto que es posible convertir una neurona que no ha respondido a placebos en un “respondedor” a éstos condicionada a la apomorfina, un fármaco dopaminérgico utilizado en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson.

En el estudio, cuando los pacientes recibieron un placebo (solución salina) por primera vez, no se indujo ningún beneficio clínico ni cambios neuronales en el tálamo, una región del cerebro implicada en el párkinson, pero tras repetidas administraciones de apomorfina antes del suministro de placebo, éste consiguió aumentar la actividad neuronal del tálamo además de generar una mejoría clínica (reducción de la rigidez muscular).

Cuanto mayores fueron las administraciones previas de apomorfina, más intensos eran los cambios neuronales y la mejoría clínica. Cuando la apomorfina se administró durante cuatro días seguidos, la administración posterior de un placebo indujo una respuesta tan intensa como la generada por la apomorfina. Estos cambios duraron 24 horas.

Fabrizio Benedetti, del Departamento de Neurociencia de la Escuela de Medicina de la Universidad de Turín, en Italia, y primer autor del estudio, explica que “estos resultados muestran que es posible enseñar a las neuronas en el tálamo a responder a los placebos, de manera que un placebo no respondedor se puede convertir en un respondedor al placebo. Estos hallazgos pueden tener implicaciones profundas y aplicaciones, ya que podemos reducir el consumo de medicamentos mediante la explotación de estos mecanismos de aprendizaje. Dado que este estudio muestra que hay un recuerdo de la acción de los medicamentos, la administración alternativa de fármaco-placebo-fármaco-placebo, etcétera, significa que los pacientes tendrán que tomar menos medicamentos, pero obtener todavía el mismo beneficio clínico”.