l La insuficiencia de la válvula mitral es la segunda patología valvular más común.

l El Hospital General es centro de referencia en cirugía reparadora mitral compleja.

| 2011-05-06T15:33:00+02:00 h |

Toni Martínez

Valencia

El Instituto Cardiovascular del Hospital General de Valencia ha presentado una nueva técnica quirúrgica propia para la reconstrucción de la válvula mitral que consiste en una reconstrucción, parcial o total de la misma, mediante la implantación de cuerdas o suturas de PTFE (politetrafluoroetileno), un material muy utilizado en cirugía cardiovascular y que ya ha demostrado su buena tolerancia por parte del paciente.

Como explica el doctor Rafael García Fuster que presentó esta técnica en Nueva York, “estas cuerdas se implantan donde se han roto las cuerdas de la propia válvula del paciente, después la válvula se pliega sobre sí misma para medir la longitud adecuada de las cuerdas y poder implantar un gran número de estas cuerdas con seguridad y eficacia”. Posteriormente la válvula se despliega y todas las cuerdas reconstruidas entran en funcionamiento, “lo que permite recuperar el mecanismo de cierre normal de la válvula”, tal y como indica el cirujano del hospital valenciano. Además, cabe destacar que esta reparación se realiza mediante una cirugía mínimamente invasiva a través de incisiones de menos de 6 cm.

Mejor que la artificial

En muchas ocasiones las intervenciones en la que la válvula mitral se encuentra implicada acaban en su sustitución por una válvula artificial lo que obliga, en muchos casos, a realizar revisiones periódicas y a tomar una medicación anticoagulante que debe ser muy bien seguida y controlada.

Tal y como indica Juan Martínez León, director del Instituto Cardiovascular, su equipo ha demostrado que “la cirugía de la reparación mitral es el procedimiento recomendado para el tratamiento de la insuficiencia mitral severa, por encima del recambio valvular con prótesis debido a que tiene una menor tasa de mortalidad operatoria y de infarto cerebral, así como una mejor supervivencia a largo plazo”.

Una de las causas de los beneficios de esta nueva técnica frente a la sustitución por una válvula artificial es que esta última no es tan perfecta como la propia válvula de la persona. Asimismo, el corazón tiene que adaptarse a un dispositivo que reconoce como extraño y que “puede acarrear alguna complicación en algunas personas como la formación de coágulos y embolias, deterioro o infección de la válvula artificial o deterioro de la bomba cardíaca”, explican los cirujanos del Hospital General.

“Por estos motivos”, aseguran que “mantener la propia válvula es lo ideal para evitar los problemas que aparecen con las válvulas artificiales, y el desarrollo de técnicas como la reconstrucción a través de cuerdas o suturas de PTFE contribuye a ello porque ha demostrado eficacia y seguridad”.