c.m.l. Madrid | lunes, 24 de noviembre de 2014 h |

Rediseñar el modelo de financiación de las comunidades autónomas es una petición que varias instituciones santiarias y organismos llevan pidiendo desde hace tiempo. Teniendo en cuenta los análisis que la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ha estado elaborando en los últimos años en cuanto a retribuciones, situación laboral de los profesionales, etc., el sindicato ha elaborado una propuesta para llevar a cabo el nuevo diseño del modelo de financiación. La propuesta la presentó el pasado fin de semana durante el comité ejecutivo que celebró en Galicia. En el encuentro, la organización destacó que el presupuesto actual es “insuficiente para garantizar el adecuado funcionamiento de los servicios sanitarios” y, a su juicio, se hace necesario proceder a un nuevo modelo donde el Estado aporte más dinero para sanidad, lo reparta mejor entre las CC.AA. y éstas, a su vez, se comprometan a invertirlo en el sector y no a otros cometidos.

De este modo, para el sindicato el porcentaje de PIB que España dedica a Sanidad, el 6,7 por ciento, es insuficiente y está por debajo de la media europea (7,4 por ciento). Además, según las previsiones de la OCDE España seguiría a la cola del gasto sanitario en relación al PIB nacional de las economías de los países más industrializados del mundo de aquí al 2030. De este modo, CESM propone que la aportación pública ascienda del 6,7 por ciento al 7,5 por ciento como mínimo. Eso sí, la institución apuesta por unos presupuestos con carácter finalista, garantizando que los ingresos generados y los ahorros se han de destinar exclusivamente a financiar la sanidad. Para la organización el actual modelo de financiaión permite decidir la proporción que dedican a sanidad sin garantizar ninguna cantidad mínima, lo que contribuye a explicar la gran disparidad en el gasto público según cada comunidad autónoma.

Con todo, CESM vuelven a pedir un Pacto por la Sanidad con las comunidades y los grupos políticos, para evitar las decisiones partidistas. De este modo, la organización apuesta por otorgar mayor trasparencia en la gestión, centralización de compras, creación de una agencia de evaluación tecnológica encargada de planificar el uso y adquisición de instrumental técnico, dar una respuesta más eficaz a la atención que merecen los pacientes crónicos y la potenciar el sector de atención primaria.