Esther Martín del Campo Madrid | viernes, 25 de abril de 2014 h |

La falta de adherencia a los tratamientos cuesta en nuestro país 11.250 millones de euros anuales. El precio de que entre el 20 y el 50 por ciento de los pacientes, según la patología, no tome el tratamiento tal y cómo le ha sido prescrito. Estas cifras representan sólo una parte del problema. Las tecnologías de la información y la comunicación (TICS), parte de la solución que se puede implementar para resolverlo.

Un informe realizado por el Servicio de Farmacia Hospitalaria del Hospital Arnau de Vilanova de Valencia, la consultora I-Claves y la Sociedad Española de Farmacoterapia y Atención Farmacéutica ha permitido conocer los hábitos de los pacientes en el uso de estas tecnologías y explorar las opciones que pueden mejorar la adherencia a las terapias.

Es el punto de partida en la búsqueda de nuevos aliados para mejorar esta situación. De hecho, Enrique Soler, jefe del SFH del hospital valenciano, indica que hay que revisar las oportunidades, así como las limitaciones que ofrecen estas tecnologías, para posicionarlas adecuadamente. Y eso es precisamente lo que hace el estudio “Paciente al día, atención farmacéutica al día”, patrocinado por MSD.

Los autores analizaron las respuestas de casi 600 personas (la mayoría pacientes, pero también familiares) que acudieron al SFH del centro durante 2013, de los 2.800 pacientes del año pasado. Participaron por igual hombres y mujeres, principalmente pacientes, y con una edad media de 50 años.

El 64 por ciento de los encuestados asegura ser usuario de internet y más del 43 por ciento lo consulta a través del móvil. De estos últimos, un 70 por ciento utiliza aplicaciones y un 19 por ciento de salud en particular.

Aunque sólo un dos por ciento de los encuestados reconoce tener dudas sobre la medicación, hasta un 44 por ciento estaría interesado en recibir información adicional sobre el tratamiento, preferiblemente a través de internet (un 54 por ciento). En la misma línea, el 92 por ciento de los encuestados confiaría en la información que recibe a través de internet o el teléfono móvil si fuera proporcionada directamente por su SFH.

Al margen del interés, menos de la mitad de los encuestados admiten buscar información sobre los tratamientos. A mayor nivel de formación y menor edad, más tendencia a realizar esta búsqueda a través de internet, indican.

Además, casi un sesenta por ciento de los usuarios encuestados desearían que se les recordase a través de este tipo de canales la cita de su próxima consulta farmacéutica.

Con estos datos sobre la mano, sus autores se muestran convencidos de la utilidad de desarrollar servicios relacionados con la tecnología en movilidad y de carácter no invasivo para los usuarios, que se complementen con herramientas de apoyo más adaptadas a todos los tipos de usuario, por ejemplo portales web, sin olvidar los grupos de población que por edad o nivel de formación ven limitado su acceso a las nuevas tecnologías y requieren sistemas tradicionales de información. Un abanico de soluciones que deben tener en cuenta la brecha digital que existe entre los usuarios de los SFH, según la edad de los pacientes y sus niveles de estudios.

El informe realiza un repaso por las principales herramientas desarrolladas para mejorar la adherencia terapéutica y recoge algunas experiencias internacionales que han demostrado ser efectivas.

Entre las primeras destacan los servicios online orientados a ayudar a pacientes y cuidadores a mejorar este seguimiento, especialmente importantes en países como Estados Unidos. Portales como eCareDiary.com, Intelecare.com, Rememberitnow.com,Scriptyourfuture.org, o Merckengage.com, esta última con versión en español, proporcionan herramientas para facilitar el seguimiento de los tratamientos, ayudar a gestionar los principales problemas de salud o programar recordatorios para las tomas, además de archivar historiales médicos o contactos del paciente, entre otras utilidades prácticas.

La lista de aplicaciones para móviles que recoge el documento, seleccionadas por un estudio realizado por la Universidad de Arkansas, ofrece una idea de este interés creciente por apoyar al enfermo. Las mejor valoradas serían MyMedSchedule, MyMeds, MedSimple, Med Agenda, RxmindMe Prescription, DoseCast o PillManager, entre otras. Permiten almacenar datos, crear alertas y recordatorios y son gratuitas.

Asimismo, repasan los dispositivos y desarrollos tecnológicos diseñados para facilitar el seguimiento terapéutico. “Pastilleros inteligentes” o micro-chips todavía en estudio que, por ahora, cuentan con una desventaja principal: su elevado precio.