El abordaje precoz resulta fundamental en esta patología
| 2011-04-01T17:40:00+02:00 h |

Saray Pardo

Madrid

Cuatro de los más prestigiosos neurólgos españoles, especializados en esclerosis múltiple (EM) se reunieron en Madrid, para dar a conocer las últimas novedades sobre esta enfermedad y su tratamiento, a iniciativa de los laboratorios Teva.

Los doctores Arroyo (del Hospital Clínico San Carlos, de Madrid), Prieto (del Complejo Hospitalario de Santiago de Compostela), Fernández (Hospital Carlos Haya de Málaga) y Montalbán (Hospital Vall d’Hebrón de Barcelona), coincidieron en que, tras varios estudios realizados a lo largo de los últimos 15 años con Copaxone (acetato de glatirámero comercializado en Europa por Teva y Sanofi Aventis, el medicamento más usado en el tratamiento de esta patología), en pacientes con EM, se han reducido las tasas de recaída y se ha retrasado la progresión de la discapacidad, así como la transición a la progresión secundaria de la enfermedad.

Tratamiento precoz

El abordaje precoz resulta fundamental en esta patología. “Es el elemento más importante y el descubrimiento más destacado de la última década” cuenta Arroyo, quien además destaca que cinco estudios al respecto, uno de ellos realizado con Copaxone, demuestan que la eficacia de los fármacos depende del momento en el que se inicie el tratamiento, “siendo más importante el efecto cuanto antes se emplee el medicamento en el curso de la enfermedad. En este sentido, Copaxone es la mejor opción terapéutica”. “Un estudio que demuestra que la administración del medicamento, desde el inicio del diagnóstico, mejora el desarrollo de la enfermedad a corto y medio plazo”, refrenda Montalbán.

Precisamente, continúa este experto, acaban de aparecer unos nuevos criterios diagnósticos (los de McDonald, tercera revisión) mediante los cuales se puede realizar el diagnóstico de EM el primer día, del primer síntoma, en el 50 por ciento de los pacientes, “lo cual supone un gran avance para el diagnóstico precoz de esta enfermedad”.

Respecto a la llegada de terapia oral y nuevos anticuerpos monoclonales Prieto señala que pueden llegar a ser muy importantes en el tratamiento de la EM, pero “todavía están por ver algunos de los efectos secundarios”, igual que Fernández, quien estima que “con el tiempo van a revolucionar el abordaje de la enfermedad pero es preciso tener más datos de su efectividad a medio y largo plazo”.

No sucede lo mismo con la investigación con células y, en opinión de Arroyo: “Esta será una terapia más, pero probablemente no será la solución. Quizá en un futuro, usando células distintas de las que usamos ahora, los beneficios serán mayores”. “De momento y en este sentido, el efecto regenerador de las células está lejos de conseguirse”, sentencia el doctor Montalbán.