Gestión/ Más de 40 directivos analizan en Madrid los retos en época de ajustes

La crisis plantea medidas de las que “ni se podía hablar”

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Esther Martín del Campo Madrid Los directivos catalanes han sido “pioneros” en la gestión de los recortes sanitarios. Su experiencia y su visión de las reformas que planean en el horizonte del Instituto Catalán de la Salut (ICS), en particular la del gerente del Hospital de Bellvitge, Xavier Corbella, que es también responsable territorial del Área Metropolitana Sur del ICS y coordinador del 7º Workshop en Gestión Sanitaria de Novartis, servirá para que los cuarenta gerentes que participaron la semana pasada en este foro puedan tener una idea de lo que podrán hacer “cuando les toque”. Que este momento llegará, si no lo ha hecho ya, es algo en lo que coincidieron todos. En su análisis, Corbella repasó alguno de los cambios estructurales que centran el debate en Cataluña. Medidas que irían hacia un cambio de modelo en una comunidad con un gran peso del modelo concertado, ya que el ICS, con estructura y gestión pública, representa solo una tercera parte del presupuesto sanitario. El gerente de Bellvitge destacó su impresión de que el sector sanitario público catalán se encamina “hacia una multiprovisión público privada, en la que el servicio va a ser público igual, pero en la que la gestión probablemente dará entrada a otras fórmulas y entidades que hasta ahora no se habían dado”. Hasta el punto de que los hospitales del ICS podrían llegar a realizar actividad privada, en línea con Barnaclínic, la oferta privada del Hospital Clínic de Barcelona. “Es una idea y de hecho se propuso que el ICS pudiera realizar actividad privada —confirmó— pero de momento ha sido frenada en el parlamento. La realidad es que está regulado por una ley que no ha cambiado”. Sin embargo, su opinión “y la de otros profesionales” es que el asunto está “frenado, pero no cerrado”. “Estoy convencido de que, viendo la crisis que hay, si la gente ve que esta fórmula da trabajo y permite que los centros se sostengan y que el sistema se desarrolle, cosas que hasta ahora no se podían ni tan siquiera hablar en estas áreas, llegarán a plantearse”, indicó. No en vano, recalcó que mientras los centros concertados “pueden hacer privada”, ellos no, de manera que “el debate está en si estos hospitales necesitan jugar con las mismas reglas para que sean sostenibles”. En cualquier caso, el gerente insistió en que “hay que garantizar valores de equidad, gratuidad y accesibilidad” y subrayó que el miedo de ciudadanos y profesionales es “que se pierdan sistemas que no se pueden perder”, un punto en el que destacó que todos están de acuerdo. No obstante, hay que buscar fórmulas para financiarlos: “Si un hospital, por ejemplo, puede realizar actividad privada, respetando la ética de acceso, para mejorar la financiación y prestar mejor asistencia pública, sería una opción”, apuntó. Corbella recordó que el debate sobre la reformulación del ICS plantea dar más autonomía a los centros. “Cada hospital debe tenerla para relacionarse con otras organizaciones”, dijo. Como ejemplo, el directivo afirmó que el ICS cuenta con un único número de identificación fiscal. “¿Por qué no se pueden dar NIFs a centros de primaria y hospitales y promover la autogestión para que los profesionales se agrupen y formen sociedades que puedan gestionarlos?”, cuestionó el gerente. Al margen de reformas estructurales, que corresponden a los políticos, Corbella destacó el esfuerzo de los centros catalanes para asumir la reducción del diez por ciento del presupuesto en 2011. Un cinco por ciento, aseguró, se ha ganado con el ajuste de ineficiencias, optimizando plantillas y reduciendo bajas laborales. Los gerentes son conscientes de que la crisis económica está transformando la conciencia colectiva. Que “nada volverá a ser igual” es una idea que comparte con César Pascual, gerente del Hospital Marqués de Valdecilla, y José Manuel González, gerente del Complejo Hospitalario de Pontevedra, ponentes del encuentro. Como muestra, uno de los problemas de los directivos en la gestión de recursos humanos, el coste económico de la incapacidad temporal en los profesionales sanitarios, que oscilaba entre el ocho y el 18 por ciento —aunque entre los facultativos apenas llega al dos por ciento—, se ha reducido drásticamente en los últimos dos años. En Galicia y Cataluña, según los gerentes, ahora ronda el cuatro y el seis por ciento, incluso entre las categorías con mayor absentismo. Los directivos reclaman reformas en la prestación de la IT que “desincentiven” las bajas laborales, aunque admiten que hay una mayor concienciación y que la ausencia de sustituciones y la vinculación de estas variables a las retribuciones, así como el refuerzo de la labor de inspección, están dando sus frutos. | viernes, 28 de octubre de 2011 h |

La situación económica está transformando, en opinión de los gerentes, la conciencia colectiva

Corbella opina que el sector público catalán va hacia una multiprovisión público-privada