| viernes, 10 de diciembre de 2010 h |

Redacción

Madrid

Un estudio liderado por la investigadora Vicenta Llorente, del Centro de Investigación Cardiovascular, centro mixto entre el CSIC y el Instituto Catalán de Ciencias Cardiovasculares, muestra que las isoformas Srebp-1 y Srebp-2 (proteínas que intervienen en la regulación del colesterol), modulan negativamente la transcripción del receptor LRP1, clave en señalización intracelular.

Estos resultados tienen especial interés para el control de la aterosclerosis ya que sugieren que la sobrexpresión de Srebp-2 podría prevenir la inducción del LRP1 vascular en situación de hipercolesterolemia.

La acumulación de lípidos en la íntima arterial es un proceso crucial en la progresión de la aterosclerosis. Cuando las lipoproteínas de baja densidad (LDL) penetran en la íntima arterial, se unen a los proteoglicanos de la matriz extracelular, dando lugar al complejo agLDL. Este complejo induce una fuerte acumulación de colesterol intracelular en las células del músculo liso vascular (CMLV). El receptor responsable de la unión y de la internalización del complejo agLDL es el receptor LRP1.

El LRP1 se encuentra sobrerregulado por agLDL en CMLV humanas y por la hipercolesterolemia en la pared vascular. La hipercolesterolemía, por tanto, podría desempeñar un papel proaterosclerótico a través de la inducción de la sobreexpresión de LRP1 en las placas ateroscleróticas avanzadas. Como LRP1 no sólo actúa como receptor transportista, sino también como regulador de la señalización celular, es de interés crucial saber cómo se modula la expresión de LRP1.

En el estudio se manifiesta que el silenciamiento específico de las isoformas Srebp-1 o 2 aumenta la expresión de LRP1, mientras que su sobreexpresión la disminuye.