José A. Rodríguez Env. esp. a Roma | viernes, 12 de junio de 2015 h |

La entesitis, uno de los rasgos característicos de la artritis psoriásica (APs), consiste en una inflamación en aquellos lugares en los que los tendones o los ligamentos se insertan en el hueso. Y provoca limitación funcional y dolor, normalmente, en el talón, los codos o la planta del pie, en muchos pacientes

Ahora, un análisis post-hoc del ensayo de fase III Palace con apremilast (Otezla, de Celgene) muestra que este fármaco reduce significativamente los síntomas de la entesitis a largo plazo. Con una administración de 30 mg dos veces al día se consiguió una reducción del 57,7 por ciento del índice medio de Mases (una escala para la evaluación de la entesitis) en la semana 104. Otro dato destacable es que, en esa semana, un 48,7 por ciento de los pacientes lograron una puntuación de 0 en la escala, es decir, ausencia de dolor en las partes del cuerpo evaluadas. Apremilast es un inhibidor oral de PDE4 (fosfodiesterasa 4) que aumenta los niveles intracelulares de AMPc (monofosfato de adenosina cíclico) y está aprobado para adultos con APs activa

Juan Cañete, reumatólogo del Hospital Clínic de Barcelona, señaló que es necesario que “para una patología tan compleja como la artritis psoriásica aparezcan nuevos fármacos para síntomas como la entesitis y la dactilitis”. Precisamente, nuevos análisis del ensayo Palace muestran que apremilast consigue una reducción media del 80 por ciento en el recuento de dactilitis en la semana 104. Este experto destacó que es importante diferenciar la artritis reumatoide de la APs, ya que ésta “puede presentar muchos fenotipos y en ella hay implicadas vía inflamatorias diferentes, como demuestra la eficacia de apremilast, que inhibe vías específicas de la artritis psoriásica”.

En cuanto a su perfil de seguridad, Philip Mease, director de la división de Investigación en Reumatología del Swedish Medical Center (Estados Unidos), destacó que este medicamento “causa pocos efectos secundarios, y uno de ellos es la diarrea, que suele solucionarse en menos de 4 semanas”. Asimismo, este experto señaló que apremilast no aumenta el riesgo de depresión ni se produjo ningún suicidio en el estudio. También comentó que se observó una pérdida de peso del 5-10 por ciento en un 10 por ciento de los pacientes, “una consecuencia muy interesante, aunque sería necesario realizar más investigaciones para saber las causas”.

En lo que respecta a cuándo recetar este medicamento, Mease opinó que “se podría dar después de los medicamentos antirreumáticos convencionales (DMARDs) y antes de los biológicos”.

Por otro lado, en el caso de que se produzca una respuesta parcial con el tratamiento con apremilast, dijo que sería interesante estudiar la posible eficicacia de añadir una terapia biológica.

Nuevos datos de secukinumab

En espondilitis anquilosante (EA) se presentaron datos del ensayo de fase III Measure 2 que muestran que el 73,8 por ciento de los pacientes tratados con secukinumab 150 mg alcanzaron una mejora clínicamente significativa de los síntomas tras un año de tratamiento, según las mediciones de ASAS20. “Resultados que confirman la eficacia ya demostrada de este fármaco a las 16 semanas”, comentó Jordi Gratacós, del servicio de Reumatología del Hospital Universitario Parc Taulí y miembro de Grupo para el Estudio de la Espondiloartritis de la Sociedad Española de Reumatología (Gresser). Este fármaco es un inhibidor de la IL-17A ya aprobado en Europa como tratamiento sistémico de primera línea de psoriasis en placas de moderada a grave en adultos (Cosentyx, de Novartis).

Gratacós también quiso destacar que las observaciones realizadas con resonancia magnética en el estudio Measure 1 y en un estudio con ratas transgénicas con la patología “sugieren que el fármaco podría reducir la neoformación ósea”.

Microbiota y esclerosis sistémica

En el campo de la esclerosis sistémica, una investigación dirigida por Elizabeth Volkmann, de la Universidad de California, comparó la microbiota intestinal de 17 pacientes con la patología con la de 17 personas sanas. “Los análisis muestran que en los pacientes hay menos cantidad de determinadas bacterias saludables que protegen contra los procesos inflamatorios, como Bacteroides fragilis, y más cantidad de bacterias que perpetúan la inflamación, como fusobacterias, y que también se encuentran elevadas en la enfermedad de Crohn”, señaló esta experta. Esta relación entre las bacterias intestinales y la esclerosis múltiple “podría permitir que con cambios en la dieta mejoraran los síntomas de la patología”, añadió.

Niveles séricos de tocilizumab en AR

La relación entre los niveles en sangre de tocilizumab (comercializado como RoActemra por Roche) y la evolución de la artritis reumatoide (AR) ha protagonizado otros de los estudios presentados en el congreso. Como explicó Virginia Ruiz-Esquide, del servicio de Reumatología del Hospital Clínic de Barcelona, su grupo analizó “los niveles séricos del fármaco en 77 pacientes que llevaban como mínimo cinco meses en tratamiento”.

Esta experta indicó que, como señala la farmacocinética del medicamento, “los niveles por encima de 1 microgramo por mililitro de sangre indican que se produce un efecto suficiente sobre la proteína C reactiva, que es la que marca la inflamación”. Pero, en su estudio, se observó que los pacientes que están en remisión de la AR presentan niveles más elevados. “Aquellos que están por encima de los 3,48 microgramos del fármaco en sangre son los que tienen más probabilidad de remisión”, dijo. Ese es el punto de corte que proponen para plantearse que, a niveles más bajos, “es probable que el paciente esté infratratado”.

Apremilast consigue una reducción media del 80 por ciento en el recuento de dactilitis en la semana 104

La relación entre bacterias intestinales y ES podría permitir que cambios en la dieta mejoraran la patología