rocío chiva Madrid | viernes, 06 de febrero de 2015 h |

Un equipo de investigación del Centro Helmholtz de Células Madre de Múnich, liderado por Magdalena Götz, ha conseguido generar neuronas in vivo, dentro del propio cerebro, a partir de células gliales, con un porcentaje de eficacia “altísimo, del 90 por ciento”, tal y como ha explicado Sergio Gascón, investigador de este centro, en un encuentro sobre medicina regenerativa organizado por la Fundación Ramón Areces. Los experimentos, realizados en modelos murinos, consisten en realizar “un corte en la parte más externa del córtex cerebral” para producir una lesión y la muerte neuronal en este ratón. Después, aplican vectores lentivirales y retrovirales para lograr la expresión de los genes adecuados y, de esta manera, generan neuronas.

El reto, ahora, es lograr la mejora de la eficiencia en esta reprogramación directa, una tarea de la que se encarga precisamente Gascón, que explica que uno de los principales problemas es la alta mortalidad celular que se suele producir en estos procesos. Una dificultad frente a la que se muestra optimista y cauto al mismo tiempo ya que, aunque todavía no pueden hacer público nada, Gastón señala que han encontrado “varias moléculas que reducen el estrés celular”, lo que implicaría una menor mortalidad y una mayor eficiencia.

En cuanto a su aplicación, Gascón señala que “en principio, todas las enfermedades que suponen una disminución en el número de neuronas serían potencialmente aptas para aplicar este tipo de técnicas”, eso sí, en un futuro todavía lejano. Entre estas patologías, Gascón apunta a que sería más sencillo el uso de estos procesos en párkinson o epilepsia, enfermedades en las que la regeneración de neuronas “solo” serviría para la liberación de los neurotransmisores que faltan en el organismo, frente a enfermedades como el alzhéimer, en las que las neuronas tendrían que conectar específicamente en los puntos en los que conectaban las neuronas anteriores. En este aspecto de la conectividad, también existen estudios relevantes en el centro.

Ya dentro de nuestras fronteras, Ángel Raya, director del Centro de Medicina Regenerativa de Barcelona y científico principal del grupo ‘Control de Potencia de Células Madre’ del Instituto de Bioingeniería de Cataluña, explica que actualmente existen dos líneas abiertas: la generación in vitro de células de pluripotencia inducida (iPS) “cada vez más maduras” para su uso en patologías con pérdida de algún tipo de funcionalidad celular como párkinson, diabetes tipo 1 y enfermedades cardiacas, y la generación de modelos de enfermedad que permitan comprenderlas mejor.

En esta segunda línea, por ejemplo, en un estudio de comparación entre sujetos con párkinson esporádico, párkinson familiar y sujetos control, el equipo de investigación de Raya descubrió que “las neuronas dopaminérgicas degeneraban en todos los pacientes esporádicos y familiares y no en los controles en el plazo de unas nueve semanas, que se pueden extrapolar a los 50 años que pueden transcurrir en la vida real”.

Además, Raya recordó la puesta en marcha de un estudio japonés con seis pacientes a los que se les van a inyectar células de epitelio pigmentario de la retina derivadas de iPS para tratar la degeneración macular asociada a la edad, adoptando estrategias de reducción del riesgo teratogénico que ya han resultado efectivas en modelos animales.