| viernes, 14 de enero de 2011 h |

Dr. Bartolomé Beltrán, director de Prevención y Servicios Médicos del Grupo Antena3

T engo mucho interés en enterarme bien de por qué la lacra de violencia contra el personal médico se ha convertido en un grave problema social. Me parece muy oportuna la convocatoria de Juan José Rodríguez Sendín, Serafín Romero y Alberto Becerra sobre este asunto.

Por primera vez se dispone en España de un registro nacional de agresiones a médicos, cuyos primeros datos serán dados a conocer en rueda de prensa el próximo 18 de enero en la sede de la OMC.

La lacra de violencia contra el personal médico ha seguido una tendencia creciente en los últimos años, constituyendo un asunto de suficiente importancia y repercusión no sólo para el sector médico sino también para toda la sociedad española, dado que puede llegar a afectar a la calidad de la asistencia médica que se presta.

Al parecer, ha sido fundamental la colaboración de todos los Colegios de Médicos de España.

Esta iniciativa, pionera a nivel de todo el territorio nacional, parte de la voluntad de contribuir a dar respuesta y soluciones a este aumento de violencia en un sector como el de la salud, uno de los más azotados por esta problemática para la que se pide tolerancia cero.

También debo recurrir a las llamadas telefónicas que reclaman mi atención sobre la inauguración el día 28 de enero de las nuevas instalaciones de AMA. Debe estar contento Diego Murillo al culminar la afrenta pública con una infraestructura solvente para el devenir de la seguridad jurídica asistencial, pública y privada de los sanitarios de España. Dicen los arquitectos que una cuña mal puesta se carga un edificio, así que la que puso la Dirección General de Seguros ha servido para culminar el impulso de una de las organizaciones mejor implantadas en el devenir de los sanitarios.

Se incorpora a la diabetes la enfermería. Ustedes ya me entienden porque siempre han estado trabajando en ese ámbito. Pero ahora resulta que Máximo González Jurado, presidente del Consejo General de Enfermería, y Ángel Cabrera Hidalgo, presidente de la Federación de Diabéticos Españoles (FEDE) han presentado un estudio científico realizado en los últimos seis meses por el Observatorio Sanitario del Consejo General de Enfermería, así como dos guías de buenas prácticas desarrolladas por algunos de los mayores expertos españoles en este campo asistencial.

Pero sobre diabetes lo sorprendente ha sido el acuerdo-alianza entre Boehringer Ingelheim y Eli Lilly & Company.

Nadie sabía nada dentro de las compañías excepto, claro está, el director general de la alemana, Manuel García Garrido y Eric Patrouillard de la americana. Ahora quieren comercializar conjuntamente una cartera de fármacos contra la diabetes, que actualmente están en fases de desarrollo media y final. Entre ellos se encuentran dos antidiabéticos orales de Boehringer Ingelheim (linagliptina) y dos análogos de insulina basal de Lilly. Asimismo, se acordó la posibilidad de desarrollar y comercializar conjuntamente el anticuerpo monoclonal anti-TGF-beta de Lilly.

Aproximadamente el 90-95 por ciento de los afectados padecen diabetes de tipo 2. La diabetes supone unos costes de aproximadamente 174.000 millones dólares por año en gastos médicos directos e indirectos en los Estados Unidos. Según los Centros para el Control y la Prevención de la Salud de la National Health and Nutrition Examination Survey, aproximadamente el 60 por ciento de las personas con diabetes no logra su objetivo de glucemia con su actual pauta de tratamiento.

Quiero recordar que la linagliptina es un inhibidor de la dipeptidilpeptidasa-4 (DPP-4) descubierto por Boehringer Ingelheim en desarrollo como comprimido oral de una única administración al día para el tratamiento de la diabetes de tipo 2. Actualmente, se encuentra en fase de revisión por parte de las autoridades sanitarias de Estados Unidos, Europa y Japón. El compuesto BI10773 de Boehringer Ingelheim, un inhibidor del cotransportador de glucosa dependiente de sodio 2 (SGLT-2), empezó la inclusión de pacientes en los estudios clínicos de fase III el pasado año. Este fármaco pertenece a una nueva clase emergente de antidiabéticos que inhibe la reabsorción tubular de glucosa en los riñones.

Porque tampoco conviene olvidar que la alimentación nociva, el sedentarismo y la hipertensión son los principales factores de riego de la Insuficiencia Renal Crónica. Y sabemos que los casos de enfermedad renal se incrementan sobremanera por el aumento de la obesidad y la diabetes. Así que demos la bienvenida al acuerdo que está en el camino de mejores soluciones. Seguro.