El Comité Ejecutivo de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ha acordado hacer pública su ruptura con el ministerio de Sanidad ante el “fehaciente” incumplimiento por parte de éste de los acuerdos firmados en La Moncloa el 30 de julio de 2013 con el Foro de la Profesión Médica, del que forma parte los colegios, el sindicalismo profesional que encarna nuestro sindicato, todas las sociedades científicas, los decanos de las Facultades de Medicina y los estudiantes.Asimismo, CESM ha decidido movilizar a los médicos españoles para dar respuesta a la situación actual.
El calendario y entidad de estas protestas se anunciarán en breve por el sindicato en rueda de prensa.
Gestión clínica
Las causas que han motivado el anuncio de ruptura son varias, aunque destaca en especial la relativo a la implantación de las unidades de gestión clínica, concebidas para que los médicos podamos participar activa y directamente en el funcionamiento asistencial de los centros.
En concreto, el texto legal que ha preparado el ministerio a tal efecto no recoge que el liderazgo de tales unidades debe ostentarlo un médico, ni excluye, como pedimos nosotros, que los incentivos deban ir ligados al ahorro. Tampoco contempla que la designación del director debe realizarse a través de concursos públicos, y no mediante libre designación, es decir, a dedo.
Cabe recordar que, junto con una declaración taxativa a favor de la sostenibilidad económica y potenciación de la sanidad pública, la introducción do la Gestión clínica en el Sistema Nacional de Salud fue uno de los puntos centrales del acuerdo que firmamos los médicos con el actual Gobierno en julio de 2013.
Posteriormente, CESM elaboró un documento, refrendado por el Foro de la Profesión, sobre cómo debe articularse tal iniciativa. Y en él dejamos muy claro, entre otras cosas, que por competencia y responsabilidad, tales unidades deben ser lideradas por los propios médicos.
Precariedad laboral
Por otra parte, y siguiendo con las causas que explican la decisión tomada hoy por el Comité Ejecutivo de la Confederación (del que forman parte todos los sindicatos autonómicos), hay que señalar que la precariedad laboral no sólo no se reduce, sino que va a más. De hecho, el Estado se ha convertido en la mayor empresa de trabajo temporal de España, como se pone de relieve en la segunda oleada del “Estudio sobre la situación laboral de los Médicos en España”, elaborada en base a 11.731 encuestas de médicos colegiados y realizada por la Organización Médica Colegial (OMC) en colaboración con la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM).
Según esta encuesta, en la que han participado 51 de los 52 colegios médicos del país y cuenta con el aval del Foro de la Profesión Médica, el 41,6% de los facultativos que trabajan actualmente en el Sistema Nacional de Salud (SNS) sin plaza en propiedad lo hacen con contratos precarios, tres puntos por encima de la encuesta anterior.
Para colmo, el proyecto de Presupuestos Generales del Estado nos asigna una subida salarial de sólo el uno por ciento para el próximo curso, cuando lo cierto es que desde 2010 los continuados y diversos recortes retributivos habidos desde entonces han disminuido nuestro poder adquisitivo en torno a un 25 por ciento.
