J. NIETO Madrid | viernes, 16 de marzo de 2012 h |

No hubo acuerdo y, finalmente, serán dos los candidatos que el próximo 22 de marzo acudan a la asamblea general de la patronal de la distribución de medicamentos, Fedifar, para optar a presidirla durante los próximos tres años. Así, tanto el candidato de Hefame, Antonio Abril, como el de Asecofarma, Lluís Barenys, presentaron nuevamente sus candidaturas para sustituir al frente de Fedifar a su actual presidente, Antonio Mingorance.

En este sentido, cabe destacar que en la última asamblea ambos candidatos no lograron obtener el apoyo de los dos tercios de los representantes de la asamblea necesarios para acceder a la presidencia, ya que se produjo un empate a 14 votos, por las tres abstenciones correspondientes a los representantes de Edifa. Sin embargo, en esta ‘segunda vuelta’ los dos candidatos solamente necesitarán la mayoría simple para convertirse en presidente de la patronal.

Eso sí, los movimientos que se han producido en el seno de Fedifar desde la asamblea celebrada el 16 de febrero, al pasarse de 31 a 33 representantes, han modificado ligeramente ese equilibrio de fuerzas entre ambas candidaturas. A este respecto, cabe destacar que, previsiblemente, según ha podido conocer EG, la balanza se inclinaría a favor de Abril, que contaría con el apoyo de 17 representantes asamblearios (los correspondientes a Cofares, Alliance, Hefame y El Consorcio) por los 16 que darían su voto a Barenys (Asecofarma, Farmanova, Edifa, Distrifarma y Cecofar). Una situación que, de no cambiar esta semana, daría la presidencia a Abril.

Afrontar tiempos difíciles

Lo que es una realidad es que el nuevo presidente de la patronal se enfrentará a un escenario difícil para el sector. Una situación que necesitaría la unión de todas las empresas de la distribución, algo que a muchos representantes de este sector les llevó a pedir que se produjese un consenso para que únicamente se presentase una candidatura.

Pese a todo, la nueva ejecutiva de la patronal deberá hacer frente a asuntos como los relacionados con impagos y retrasos que se han producido en varias las comunidades que ha puesto en dificultades a las farmacias. Asimismo, deberá abordar aspectos como el posible cambio en modelo de prestación farmacéutica, posibles nuevas medidas de recorte y el “esperado” Real Decreto de Distribución.