Almudena Fernández Madrid | viernes, 26 de septiembre de 2014 h |

Una nueva indicación para el acetato de abiraterona (comercializado por Janssen como Zytiga), administrada antes de quimioterapia en pacientes con cáncer de próstata metastásico resistente a castración (CPRC), puede prolongar entre dos y tres años la supervivencia de estas personas cuando su calidad de vida es todavía buena. Podrán beneficiarse de este tratamiento entre el 15 y el 20 por ciento del total de pacientes con esta enfermedad, tal y como explicó el presidente del Grupo Español de Oncología Genitourinaria (Sogug), Daniel Castellano, durante la presentación de esta nueva indicación. Hasta ahora, el fármaco se aplicaba en combinación con prednisona y prednisolona únicamente en los hombres cuyo CPRC hubiese progresado o después de someterse a tratamientos con quimioterapia.

En una dosis diaria de 1.000 miligramos ofreció resultados de eficacia antes de quimioterapia en un estudio de fase III , demostrando una reducción del riesgo de muerte del 21 por ciento, llegando a los 35,3 meses de mediana de supervivencia global, así como una reducción del riesgo de progresión de metástasis ósea en un 48 por ciento.

La coordinadora del Grupo de Tumores Urológicos (Uroncor), Carmen González San Segundo, por su parte, incidió en que cuando la enfermedad alcanza estos estadios avanzados los pacientes pueden vivir así años, por lo que el objetivo pasa porque lo hagan con una buena calidad de vida, precisen acudir el menor número de ocasiones al hospital y se retrase el consumo de opiáceos, algo que, a su juicio, deberá tenerse también en cuenta a la hora de calcular el coste total del tratamiento aplicado hasta ahora frente a esta nueva indicación. “La aplicación pre quimioterapia no implica que no pueda volver a recibir acetato de abiraterona después de la misma”, afirmó.

Castellano agregó que se están realizando en la actualidad estudios clínicos para comprobar si la combinación de este medicamento con quimioterapia supera los resultados alcanzados por cada uno de los tratamientos por separado al considerar que podría ser una vía de mejora. Asimismo, auguró que, en combinación con otros medicamentos que llegarán próximamente a España, podrían llegar a cronificarse los casos avanzados de la enfermedad sin que ocasione la muerte.

Por otro lado, Antonio Fernández, director de Acceso a Mercado y Government Affairs de Janssen explicó que han llegado a un acuerdo con las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad respecto a este fármaco fijando un techo de gasto (si se sobrepasase, el laboratorio asumiría el coste por encima del mismo) en función de criterios poblacionales: número de habitantes y de hombres mayores de 55. El precio para el SNS es de 2.900 euros por ciclo y podrán beneficiarse de este tratamiento entre 2.500 y 5.000 pacientes al año.

Una nueva indicación para el acetato de abiraterona (comercializado por Janssen como Zytiga), administrada antes de quimioterapia en pacientes con cáncer de próstata metastásico resistente a castración (CPRC), puede prolongar entre dos y tres años la vida de estas personas cuando su calidad de vida es todavía buena. Podrán beneficiarse de este tratamiento entre el 15 y el 20 por ciento del total de pacientes con esta enfermedad, tal y como explicó el presidente del Grupo Español de Oncología Genitourinaria (Sogug), Daniel Castellano, durante la presentación de esta nueva indicación. Hasta ahora, el fármaco se aplicaba en combinación con prednisona y prednisolona únicamente en los hombres cuyo CPRC hubiese progresado o después de someterse a tratamientos con quimioterapia.

En una dosis diaria de 1.000 miligramos ofreció resultados de eficacia antes de quimioterapia en un estudio de fase III , demostrando una reducción del riesgo de muerte del 21 por ciento, llegando a los 35,3 meses de mediana de supervivencia global, así como una reducción del riesgo de progresión de metástasis ósea en un 48 por ciento.

La coordinadora del Grupo de Tumores Urológicos (Uroncor), Carmen González San Segundo, por su parte, incidió en que cuando la enfermedad alcanza estos estadíos avanzados los pacientes pueden vivir así años, por lo que el objetivo pasa porque lo hagan con una buena calidad de vida, precisen acudir el menor número de ocasiones al hospital y se retrase el consumo de opiáceos, algo que, a su juicio, deberá tenerse también en cuenta a la hora de calcular el coste total del tratamiento aplicado hasta ahora frente a esta nueva indicación. Incidió en que la aplicación pre quimioterapia no implica que no pueda volver a recibir acetato de abiraterona después de la misma.

Castellano agregó que se están realizando en la actualidad estudios clínicos para comprobar si la combinación de este medicamento con quimioterapia supera los resultados alcanzados por cada uno de los tratamientos por separado al considerar que podría ser una vía de mejora. Asimismo, auguró que, en combinación con otros medicamentos que llegarán próximamente a España, podrían llegar a cronificarse los casos avanzados de la enfermedad sin que ocasione la muerte.

Por otro lado, Antonio Fernández, director de Acceso a Mercado y Government Affairs de Janssen explicó que han llegado a un acuerdo con las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad respecto a este fármaco fijando un techo de gasto (si se sobrepasase, el laboratorio asumiría el coste por encima del mismo) en función de criterios poblacionales: número de habitantes y de hombres mayores de 55. El precio para el SNS es de 2.900 euros por ciclo y podrán beneficiarse de este tratamiento entre 2.500 y 5.000 pacientes al año.