La reestructuración de la Atención Primaria que llevará a cabo la consejería de Sanidad de Castilla y León trasladará a un total de 73 médicos y 45 enfermeras de zonas rurales a zonas urbanas con el fin de equilibrar los cupos, muy inferiores en las primeras.
En la actualidad, el cupo más bajo corresponde a la zona básica de salud (ZBS) Tierras Altas (Soria), con 144 tarjetas y, tras la aplicación del plan, pasará a atender a 168 pacientes. Por el contrario, el cupo más alto está en la ZBS de Laguna, en Valladolid Oeste, a la que le correspondían 1.928 tarjetas y que, cuando se hagan efectivos los traslados tendrá 1.543.
El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, durante la mesa sectorial celebrada la semana pasada, aseguró que se mantendrán intactos los servicios que se están prestando hasta el momento y tampoco variarán los tiempos de las prestaciones. Además, subrayó que Castilla y León es la comunidad que destina una mayor proporción de su gasto a la Atención Primaria y que cuenta con mejores ratios, tanto en relación con los médicos (un 31 por ciento por encima de la media nacional de familia) como de enfermeros (un 26 por ciento más favorable). En la región hay 3.652 consultorios locales, el 36,03 por ciento de los 10.155 existentes en España.
En total, dispone de 2.375 médicos de familia, a los que hay que sumar los 574 de área, que no están adscritos a un equipo concreto y su jornada laboral se realiza en los centros de salud o consultorios, tanto en las consultas ordinarias como en las guardias, cuando se producen ausencias o exenciones de guardias en los integrantes del equipo y refuerzan especialmente a los equipos rurales.