Gaceta Médica Madrid | lunes, 04 de mayo de 2015 h |

Con el objetivo de mejorar el control y la calidad de vida de las personas con asma, se acaba de publicar la cuarta edición de la Guía Española para el Manejo del Asma (GEMA4.0). Se trata de un consenso de 101 expertos en asma y representantes de 13 sociedades científicas (GRAP, Seaic, Sefac, SEFC, Seicap, Semergen, Semes, Semfyc, SEMG, SENP, Seorl, Separ y Sepeap) y la Federación Nacional de Asociaciones de Enfermedades Respiratorias (Fenaer), con el que se busca incrementar la formación de los profesionales sanitarios implicados en la atención de las personas afectadas por la enfermedad.

“Además de la necesaria actualización del contenido científico, se han incorporado tres nuevos capítulos con respecto a la última edición, de 2009: ‘Asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)’, ‘Asma grave no controlada’ y ‘Plan de difusión y de implementación’ de GEMA4.0”, ha señalado Vicente Plaza, coordinador del Comité Ejecutivo de la GEMA y jefe del Servicio de Neumología del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, durante la rueda de prensa de presentación de la iniciativa.

En primer lugar, cabe destacar que el asma y la EPOC, enfermedades ambas de elevada prevalencia, pueden coexistir en un mismo paciente. Esta coincidencia se estima en un 12 por ciento. Para que esta coexistencia tenga relevancia clínica, debe influir en el pronóstico y en la actitud terapéutica. Los pacientes con EPOC que también tienen asma presentan un mayor riesgo de padecer exacerbaciones. “Posiblemente en el futuro se superarán los actuales compartimentos estancos que separan pacientes con EPOC y asma y se avanzará hacia un concepto global de enfermedad de la vía aérea que, en cada paciente, se relacionará con un patrón inflamatorio definido ligado a manifestaciones clínicas, determinantes pronósticos y tratamientos específicos y más eficaces”, apunta el experto.

Otro aspecto novedoso de la guía tiene que ver con el asma grave no controlada (AGNC), que se estima afecta a cerca del 4 por ciento de la población asmática y se asocia a un mayor consumo de recursos económicos en comparación con los casos moderados o leves. Se define al AGNC como la enfermedad asmática que persiste mal controlada pese a haber recibido tratamiento en los últimos 12 de meses. “La evidencia clínica disponible a este respecto resulta de tan baja calidad que la mayoría de las recomendaciones que se proponen –y la GEMA4.0 no está exenta- se basan en opiniones de expertos”, según Plaza.

Durante la presentación, Santiago Quirce, coordinador representante de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic) y jefe del Servicio de Alergología del Hospital Universitario La Paz, de Madrid, ha pedido a la administración sanitaria “el desarrollo de un Plan Nacional para el Asma, la creación de más consultas monográficas de AGNC en el Sistema Nacional de Salud y la mejora de la educación y el conocimiento sobre esta enfermedad”.

Por su parte, Soledad Alonso, vicepresidenta de Fenaer, ha dicho que “se ha mejorado de manera importante en los mecanismos de administración de los medicamentos antiasmáticos y hay nuevos fármacos que están demostrando su efectividad”. Desde la Fundación, se insiste en la “necesidad inexcusable de aplicar buenas prácticas de fisioterapia respiratoria” y se valora el hecho de que “se haya contado con sus consideraciones respecto de la guía GEMA”.

En relación con esta nueva edición de la guía GEMA, se ha rediseñado la página web, se ha evolucionado y modernizado el logotipo y se ha realizado un cambio en la denominación del documento (GEMA4.0), que deja la puerta abierta a sucesivas actualizaciones on line.