Lucía Barrera, Directora de
Gaceta Médica
| viernes, 23 de octubre de 2015 h |

Está claro. España debe de mirar hacia Europa y no sólo para cumplir con los objetivos de déficit que se nos imponen desde Bruselas. Si queremos no perder el tren de la investigación no queda más remedio que hacerse competitivos en la consecución de fondos extramuros. Por primera vez nuestro país ha recibido más de lo que aporta en los programas europeos de investigación. España es el cuarto país receptor en el Horizonte 2020 después de Reino Unido, Holanda y Alemania, según el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI). Todo un logro en el que hay que seguir trabajando. Contamos con las personas, el conocimiento y la forma de interacción pero siguen fallando los recursos. De hecho, según Nature, España está entre los cinco primeros países de Europa Occidental en producción científica de alta calidad y estamos entre los diez que más publican a nivel general.

En este punto, Emilia Sánchez Chamorro, directora de Planificación, Investigación y Formación de la Consejería de Sanidad madrileña lo tiene claro: Su gran objetivo no es otro que la captación de fondos extrapresupuestarios, que no están en las comunidades sino en Europa. Ésta no fue la única conclusión que se extrajo del foro de debate con investigadores que organizó la pasada semana Celgene sobre la materia, donde el planteamiento inicial fue la concepción de la investigación biomédica como motor de cambio para el modelo productivo del país, algo que, por desgracia, aún no nos acabamos de creer a la vista de los fondos que se destinan a tal efecto.

Para muestra un botón: el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) ha sido el primero en cuanto a retorno económico por proyectos con 2.843.711 euros de los 51,1 millones de euros que ha recibido España en la última convocatoria del 2020. La congelación de los presupuestos en estos años ha supuesto un retraso importante en la carrera científica, llevábamos un buen ritmo y no podemos perderlo. Es el momento de recuperar posiciones, apostando por la innovación, y no quedarnos como meros espectadores.