‘Historia de mujeres’ es la historia de ellas. De aquellas valientes que están librando o han ganado la batalla al cáncer de mama. Laura García, directora de la Sección de Tumores de Mama dentro del Servicio de Oncología Médica de MD Anderson, puso en marcha estos documentales para analizar cómo viven las mujeres con cáncer de mama su enfermedad en los cinco continentes.
Pregunta. ‘Historia de mujeres’ es la historia de cada vez más mujeres, ¿cómo surge la idea?
Respuesta. Es salir del ombligo de España. Surgió en 2013 por la curiosidad de saber cómo está el cáncer de mama en el resto del mundo, sobre todo, porque es una enfermedad que sigue aumentando la incidencia, y sobre todo aumenta a costa de los países en desarrollo. Teníamos la idea de que el cáncer de mama no entiende de religiones o culturas y se nos ocurrió analizarlo.
P. ¿Estos documentales tienen un interés investigador también?
R. Exacto. Mezcla un papel de investigación científica, aunque no puedes dejar el papel de la propia paciente que es la protagonista.
P. Ya ha visitado dos países, China y en Sudamérica. ¿Seguirá el trabajo?
R. La idea es continuar, pero dependemos de los fondos porque es caro. El primer documental, el de China, fue gracias a una empresa privada francesa que no me conocían y que a través de un intermediario le presentamos el proyecto y le encantó y nos patrocinó el documental. El de Kenia es igual, lo tenemos por financiación privada.
P. ¿Qué conclusiones habéis sacado?
R. El problema que tiene China es la adopción de hábitos que no son muy saludables. ¿Qué esa sea la causa de todos los cánceres? No, pero que probablemente ayude, sí. Los médicos nos decían la incorporación tan rápida de la mujer china al trabajo, el estrés que tenían, la polución… Pueden que sean hábitos dudosos. Te das cuenta que las pacientes tienen los mismos miedos, independientemente del país donde estés. Fue una experiencia increíble,
P. La investigación en oncología avanza, ¿dónde estamos?
R. A nivel de tratamiento en la búsqueda de dianas específicas. Además, estamos con la clasificación molecular de tumores, gracias a ello, se pueden tratar a cada paciente de manera específica. Aunque todavía no se hace al 100 por 100 pero es uno de los mayores avances.
